Todo parece indicar que la pelirroja de 32 años retomará su carrera musical. Así lo muestran dos fotografías compartidas en su Instagram, que la muestran frente al micrófono en una sala de grabación.
Luego de más de una década lejos de los estudios de grabación, Lindsay Lohan parece decidida a retomar su carrera musical y emular el éxito que tuvieron canciones como “Rumors”, “Over”, “First” y “Bossy”. Al menos es lo que se presume luego que la pelirroja de 32 años subiera a su cuenta de Instagram dos fotos en un estudio de grabación frente al micrófono. Aparentemente, ambas imágenes tomadas el último fin de semana. Al ser consultada por sus fans sobre su nuevos planes profesionales, Lohan solo atinó a responder «Trabajando duro», en lo que parece ser una confirmación de los rumores.
Si bien durante los últimos años la carrera de Lohan se ha concentrado en diversos emprendimientos de la escena nocturna griega y en la grabación del reality para MTV ‘Lohan Beach Club’, que la actriz dirige en la isla de Miconos, todo parece indicar que Lohan buscará reeditar los éxitos del pasado en el ámbito musical.
Aunque la pelirroja no brindado mayores detalles sobre su nuevo proyecto musical, las fotos subidas a las redes sociales parecen confirmar el rumor de su regreso a la escena musical.
La caída de una estrella
Luego de triunfar como ídolo adolescente con papeles protagónicos en las películas “Freaky Friday”, “Confessions of a Teenage Drama Queen”, “Mean Girls”, “Herbie: Fully Loaded” y “Just My Luck”, la carrera musical de Lohan despegó con sus discos “Speak” y “A Little More Personal (Raw)”, ambos lanzados entre 2004 y 2005.
A partir de entonces, Lohan comenzó a protagonizar una serie de escándalos mediáticos que incluyó multas por conducir bajo los efectos del alcohol, peleas en clubes nocturnos, ingresos a centros de rehabilitación y hasta una acusación de robar un abrigo de 11 mil dólares. Finalmente, en 2007, la actriz y cantante fue encarcelada por 90 días en la prisión californiana para mujeres de Lynnwood, donde tuvo que someterse a un programa de rehabilitación de tres meses para adictos de alcohol y drogas. Este periodo oscuro hizo que Lohan perdiera varias ofertas de trabajo en cine y televisión.