Desde 2015 Misión Huascarán viene ayudando a la población en riesgo alrededor del nevado que lleva el mismo nombre, en Huaraz. Ante la crisis, sin embargo, fueron una de las primeras organizaciones en reaccionar para llevar ayuda a doctores y policías.
Por: Isabel Miró Quesada
Las iniciativas de Misión Huscarán han sido múltiples y exitosas. Desde que se fundó hace cinco años, en Mancos, Áncash, ha abordado en paralelo temas de educación, nutrición, salud, capacitación para producción agrícola y capacitación para mujeres tejedoras que, por ejemplo hoy, ya confeccionan piezas para marcas de renombre internacional.
Ante la pandemia, Misión Huascarán es el ejemplo de una organización benéfica que se reorganizó con celeridad para combatir la crisis. Han conseguido donar 30 mil mascarillas N95 y KN95 para hospitales, y esta semana esperan donar 4 mil más. Al mismo tiempo, han estado trabajando incansablemente para recolectar comida y distribuirla a los más necesitados. Se han repartido mil canastas de alimentos, y la meta es 10 mil.
Conversamos con Carla Alalú, voluntaria del grupo, y el gerente general de la institución, Marco Ríos.
¿Qué nuevas campañas está realizando Misión Huascarán en el marco de la pandemia?
Estamos desarrollando una campaña para entregar material de bioseguridad para la policía. A la fecha hemos llegado a 9 comisarías de Lima y hemos entregado más de 1250 mascarillas KN95, entre otros implementos de bioseguridad. Nuestra expectativa es triplicar esta ayuda en el corto plazo.
Por otro lado, acudimos al llamado de la Parroquia Sagrado Corazón de Jesús de Carapongo con una campaña para la entrega de víveres para familias de extrema pobreza. Ya hemos entregado más de 1000 canastas y tenemos por objetivo llegar a las 10 mil.
Asimismo, no olvidamos a nuestro querido Mancos, a más de 3000 m.n.n.m., en Áncash, tierra donde surge nuestra labor. Hemos llevado canastas con víveres para adultos mayores. Llegamos a las zonas de Yauyo, Pisca, Armapampa, Mamapampa, Ushno, Marcayoc, Huashcao, Cacchupampa y Cruzcoto.
Finalmente, seguimos con nuestra campaña para entregar equipos de bioseguridad para el personal de salud de los hospitales nacionales. Este es un trabajo en alianza con la asociación Médicos Solidarios.
Hemos adquirido 30 mil mascarillas KN95 y N95, además de mandiles, lentes de protección, guantes y alcohol en gel. Estos han sido entregados al Hospital Cayetano Heredia, el Hospital Arzobispo Loayza, el Hospital de Policía, el Hospital de Apoyo de Huaraz, el Hospital Regional de Nuevo Chimbote y DIRESA Amazonas.
¿Cuáles han sido los retos más importantes?
En estos son momentos difíciles, donde el Estado a pesar de las acciones desplegadas no ha podido brindar todos los recursos que los médicos y las fuerzas policiales requieren, el papel de instituciones civiles como nosotros y todas las personas que se han sumado, juega un rol fundamental. Un reto clave fue buscar alianzas con proveedores confiables. Hay proveedores sin experiencia ofertando productos de dudosa calidad y precios exorbitantes que nos obligan a ser muy cuidadosos en las compras. Por otro lado, en nuestro país impera una gran desconfianza de que lo donado llegue realmente a quien lo necesita. Por eso, otro reto muy importante fue sensibilizar a las personas para que donen.
Misión Huascarán antes de la pandemia y a futuro
Tengo entendido que en los últimos años se obtuvo un gran impacto en las comunidades a las que ayudan.
En 5 años hemos impactado en las vidas de más de 3000 mil familias en 24 centros poblados de los distritos de Mancos, Shilla y Amashca en la sierra rural de Áncash. A través de diversos proyectos sociales que integran programas de educación, salud, desarrollo económico y vivienda, con el fin de transformar sus vidas de una manera integral.
Hemos implementado 6 bibliotecas lúdicas, 6 biohuertos, entregado 141 tablets. Además 119 niños forman parte de un programa de comprensión lectora a través de la licencia Raz – Plus.
En el ámbito de la salud, hemos establecido un programa de nutrición infantil, que gestionan dos nutricionistas de Misión Huascarán. Identificamos que cerca del 44% de los niños en edad escolar de la zona tenían anemia. Gracias a este programa, en el 2019 logramos reducirla al 21%.
Asimismo, contamos con 2 médicos fijos en postas médicas de la zona. Ellos realizaron 1,472 atenciones en el 2019. Antes, los pobladores se abandonaban a su suerte, pues tenían que caminar hasta 2 horas para llegar a una posta de salud.
Es importante mencionar que el último año realizamos dos campañas médicas especializadas en las zonas rurales, que sumaron 404 atenciones.
Por otro lado, nuestro taller textil Tejiendo Esperanza, empodera a la mujer campesina. Ya hemos establecido importantes alianzas con reconocidas empresas del rubro textil y los productos de nuestras queridas tejedoras se están haciendo conocidos a nivel nacional e internacional.
En agricultura, nuestras ‘fresas solidarias’ ayudan a familias muy humildes a mirar el futuro con mayor esperanza a las faldas del Huascarán.
La ya célebre gala anual ha quedado suspendida, pero muchas organizaciones se están reinventando para generar espacios de interacción alternativos.
Esta última semana se realizó una exitosa venta privada de obras de artistas peruanos y extranjeros organizada por Meg de Romaña. Los ingresos se donaron para adquirir materiales de protección sanitaria. A futuro estamos evaluando organizar una subasta de arte virtual, de las que los mantendremos informados.
¿Cuáles son sus planes para el futuro, y cómo podemos colaborar?
Tenemos muchos sueños que esperamos se hagan realidad una vez que cese la inamovilidad. Proyectamos crecer de 119 a 350 niños beneficiados con nuestros programas de educación y nutrición. El plan de mejora en la comprensión lectora a través del software Raz Kids es fundamental. Creceremos de 141 a 350 tablets entregadas, y de 6 a 8 bibliotecas lúdicas. El plan de nutrición crecerá de cinco, a nueve bio-huertos orgánicos donde los niños cultivaran las hortalizas que contribuirán a un desayuno saludable. Instalaremos, además, un taller de panadería. En el rubro salud, esperamos inaugurar próximamente una posta médica móvil que ya se encuentra lista y que contará con dos profesionales. Esta recorrerá los distritos de Yungay y Carhuaz beneficiando a cientos de familias. ¡Y nuestra labor continuará!
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«Cualquier donación por más pequeña que sea será muy valorada y nos permitirá llegar a ayudar a mas personas de pobreza en zonas rurales».
Campaña equipo de bioseguridad para personal de salud
Cuenta BCP soles: 193 – 33322687-0-78
CCI: 00219313332268707814
Titular: APES MISIONES RURALES
RUC: 20256406595
Yape: 997567431 (APES MISIONES RURALES)
Campaña equipo de bioseguridad para policías
Cuenta BCP soles: 191-98281134-0-71 CCI: 00219119828113407158
Titular: Fernando Matos Donayre
DNI: 40899302
Yape: 989291465 (María Isabel García Salazar)
Campaña de entrega de víveres para la Capilla Sagrado Corazón de Carapongo
Cuenta Soles: 191-98160427-0-45 CCI: 00219119816042704554
Titular: Fernando Matos Donayre
DNI: 40899302
Yape: 989291465 (María Isabel García Salazar)
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