A diferencia de su personaje en “Al fondo hay sitio”, una de las series más vistas de la televisión peruana, Laszlo Kovacs es un romántico empedernido. En exclusiva para COSAS, el actor peruano presenta a su prometida, Mili Asalde, la mujer que revolucionó su vida y con la que caminará hacia el altar en menos de un mes.
Por Arianna Gonzáles / Fotos: Diego Moreno
Después de cinco años, Laszlo Kovacs ha vuelto a ponerse en los zapatos de Tito Lara, su personaje más popular, el cobrador de combi sin suerte en el amor que se ganó un lugar en el corazón de los peruanos y que, hace más de una década, le permitió conocer a su ahora prometida, Mili Asalde.
Corría el año 2009, y “Al fondo hay sitio”, con tan solo una temporada al aire, se había convertido en un fenómeno en la televisión peruana. Tal era el éxito que los actores de la serie, Laszlo incluido, se embarcaron en una gira que recorrió varias ciudades del país, entre ellas Chiclayo, la ciudad natal de Mili, quien decidió salir de fiesta a una discoteca sin saber que ese día conocería a su futuro esposo.
Tito es uno de los personajes más queridos de la televisión, por lo que no sorprenden las muestras de cariño de los fans luego que hicieran público su compromiso. Sin embargo, pocos conocen los inicios de su historia de amor…
Laszlo Kovacs: Nos conocimos hace catorce años. La primera vez que nos vimos fue en una discoteca en Chiclayo. Yo había llegado ahí por el circo de “Al fondo hay sitio”. Era el primer año de giras y todo fue una locura.
Mili Asalde: Luego de eso nos perdimos el rastro, porque realmente cada uno siguió con su vida. Él hizo la suya y yo seguí con la mía fuera de Chiclayo. Tuvimos relaciones largas, nunca pensamos que terminaríamos enamorados y camino al altar.
LK: Sin embargo, yo sí dejé una semillita, porque en un momento en la discoteca le tomé la mano y le dije: “No te vayas”.
MA: Así fue, pero si en ese momento alguien me hubiera dicho: “El chico que te tocó la mano en la discoteca y te dijo ‘no te vayas’ te lo va a volver a decir, pero con un anillo”, no me lo hubiera creído.
La noticia de su compromiso rebotó en muchos medios. Incluso se afirmó que Laszlo te había pedido la mano mientras comían anticuchos. ¿Cómo fue realmente?
LK: [Risas] Mili estaba muy reacia a mudarse conmigo si es que no había un compromiso de por medio. Yo le prometí que esto iba en serio, y compré el anillo y lo escondí en mi casa. Un día ella me dijo: “Necesitamos un sofá, porque tú roncas y yo necesito mandarte a un sofá, pero si vamos a invertir en un sofá, esto tiene que ir en serio”. Estábamos haciendo estiramientos y yo sentí que era el momento, aunque estuviera en calzoncillos. Saqué el anillo, me arrodillé en el mat de yoga y dije su nombre completo: “María del Milagro Margarita Asalde Rodríguez, ¿quieres casarte conmigo?”.
MA: En ese momento yo pensé: “Está loco” [risas]. Le dije que sí, nos abrazamos. Estábamos cerca al mar, fue muy lindo todo.
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