Los médicos le realizaron una intervención quirúrgica a la primera dama de Estados Unidos para extirparle dos carcinomas, uno encima del ojo derecho y otro en la parte lateral del torso.
Por Walter Chunga
El médico de la Casa Blanca, Kevin O’Connor dijo que a la primera dama de la primera potencia del mundo, le extirparon dos carcinomas, uno encima del ojo derecho y el otro ubicado en la parte lateral del torso.
Luego de esta intervención, según O’Connor, Jill Biden experimenta hinchamiento en la cara y moratones. Sin embargo, resaltó que Jill Biden goza de muy buen humor y se siente bien.
Se espera que la primera dama pueda regresar en breve a la Casa Blanca tras el alta médica. Jill Biden había acudido ayer al centro médico Walter Reed (Maryland), en las afueras de Washington, para operarse de una lesión encima del ojo. Esta intervención quirúrgica la realizaron con una técnica denominada “Mohs”, que suele utilizarse en casos de carcinoma.
En un chequeo médico rutinario detectaron la lesión y como precaución se había decidido extirparla para estudiar el tejido.
No obstante, en la última actualización sobre el estado de salud de Jill Biden, O’Connor confirmó que finalmente se trataba de un carcinoma de célula basal, uno de los cánceres de piel más comunes, por encima del ojo derecho.
La primera dama de EE.UU. se encuentra fuera de peligro tras intervención quirúrgica.
El tejido cancerígeno de Jill Biden fue eliminado con éxito
El doctor de la Casa Blanca indicó que todo el tejido cancerígeno fue “eliminado de forma exitosa”. Asimismo, comentó que no anticipan ninguna otra intervención en esa zona, aunque vigilarán “de cerca” su curación.
Además, se informó que durante la preparación de la intervención quirúrgica de Jill Biden, los galenos detectaron otra pequeña lesión en el párpado izquierdo que le fue extraído y que al momento se está analizando en el microscopio.
Los médicos hallaron otro carcinoma de célula basal en la parte izquierda del torso de la primera dama, que extirparon “de manera exitosa”.
O’Connor indicó que ese tipo de carcinomas no suele expandirse ni provocar metástasis, como otros tipos de cáncer cutáneo como los melanomas o los carcinomas de células escamosas. “Sin embargo, potencialmente pueden crecer, resultando en un problema más significativo y en mayores retos a la hora de eliminarlos quirúrgicamente”, sentenció el médico.
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