Carolina Arzubiaga tiene veintidós años y, por más que aún le faltan dos para terminar su carrera, tiene claro a dónde quiere llegar: “Me gustaría tener mi propia marca de ropa, después de haber hecho una maestría en Europa, donde probablemente me especializaría en cool hunting”. Actualmente, cursa su tercer año de la carrera de Diseño de Modas, en la UPC, y nos cuenta que, a pesar de lo que suele pensarse, la moda tiene varias vertientes.

“La moda puede contribuir de muchas maneras con el medio ambiente”, dice Carolina.

“No solo puedes hacer diseño; también te puedes especializar en compras, en cool hunting –que es algo que me llama la atención–, estilismo, comunicaciones o en dirección creativa. Hay muchas opciones por escoger”, dice Carolina, quien está a punto de empezar a cumplir el sueño de la marca propia. Ha comenzado a diseñar su línea de ropa con una amiga, y la idea es que los productos estén disponibles a partir de julio de este año.

Queremos sacar una colección femenina de ropa de fiesta para jóvenes entre dieciocho y veintisiete años. Ya hemos sacado el presupuesto, compramos telas, diseñado prototipos. La dificultad tiene que ver, en primer lugar, con ponernos de acuerdo en qué es lo que queremos hacer. Después, ya es más simple”, agrega Carolina, quien nos cuenta que su estilo es “supermoderno, sobrio, pero relajado”.

“Admiro a Karl Lagerfeld y, en el Perú, a Anís Samanez”. afirma Carolina.

Moda con compromiso social

“Siempre que he podido”, continúa, “he hecho ayuda social”. Su madre trabaja en Aldeas Infantiles, por lo que su experiencia en este ámbito tiene ya algunos años. En estos días complicados para el país, Carolina estuvo colaborando con las poblaciones afectadas por el desborde del río Huaycoloro.

¿Cómo lograr que una carrera como la de Diseño de Modas sea, también, un mecanismo para la ayuda social? “Mucha gente asocia la moda con la frivolidad”, responde Carolina, “pero hoy en día, por ejemplo, hay muchos mecanismos para reciclar ropa usada y crear con eso nuevas colecciones. En mi caso, me encantaría crear, en el futuro, una escuela de moda para personas de bajos recursos, porque no tienen los canales para formar parte de este mundo tan interesante”, asegura.

“Elegí esta carrera, porque me apasiona la moda y todo lo que la rodea”, nos cuenta Carolina.

Swarovski, un premio ideal

Carolina ganó el concurso que lanzaron Swarovski y COSAS, lo que significó que se hiciera de una colección de joyas de la prestigiosa casa austriaca. “Me fascina Swarovski. Ya tenía algunas joyas de esa marca y no podría estar más feliz de haber ganado este concurso”, comentó. “Son accesorios elegantes y sofisticados”.

Fotografía: Gonzalo Miñano
Estilismo: Sara Vílchez
Maquillaje y peinado: Olga Sonco
Agradecimientos: Swarovski, H&M, Zara, Forever 21
Producción: Carolina Erazo y Paola Gianino

Publicado originalmente en Cosas 615