Ximena Llosa no ha parado de cocinar los pocos días que lleva en Lima. Actualmente vive en Santiago de Chile con toda su familia debido al trabajo de su esposo, y solo visita Lima algunos días cada trimestre para grabar los episodios de su programa «Ximena en casa», que se transmite por Plus TV y que ya va por su tercera temporada. Además, en los últimos meses ha creado su blog https://ximenallosachef.wordpress.com/, que ya tiene más de 42,000 fans en Facebook; y más de 11 mil en Instagram.
Ximena nos recibió en su casa de Lima para contarnos cómo agasaja a su esposo Carlos cada Día del Padre, y para recomendarnos tres recetas, fáciles y deliciosas, con las cuales soreprender este domingo a los reyes de la casa.
¿Cómo celebra el Día del Padre tu familia?
Tenemos la misma tradición tanto para el Día del Padre como para el Día de la Madre: le llevamos el desayuno a la cama al celebrado. En este caso, mis hijos y yo nos levantamos temprano, vamos a la cocina despacito, preparamos algo rico y lo llevamos en un azafate.
Uno hace el jugo, otro hace el café, a alguien se le ocurre preparar tostadas francesas… felizmente a Carlos, mi esposo, le gusta comer rico. Además, le llevamos tarjetitas con dibujitos de los niños. También le escriben cosas lindas. Y es lo máximo porque va comiendo su desayuno en la cama, y todos le vamos gorreando, eso sí. (risas)
¿Cuál es el desayuno favorito de Carlos?
Le encantan los huevos, y los hacemos según lo que nos provoque: fritos, en ommelette, etc. Siempre hacemos panqueques, crepes, y como mis hijas ya pueden cocinar solas, Macarena dice: “yo me encargo de la tostada francesa”, Micaela hace el jugo, y así vamos viendo, y cada uno pone de su parte y sale súper lindo. Y si Carlos se despertó, tiene que hacerse el dormido porque la idea es sorprenderlo.
Entre los niños, está de moda cocinar. Muchas fiestas infantiles ahora son reuniones de cocina entre las niñas. ¿A tus hijos también les gusta cocinar, como a ti?
Les encanta: Maca tiene casi 12, Micaela tiene 9 y Joaquín tiene 7. Los tres tienen mucha habilidad con las manos porque desde chiquitos han entrado a la cocina. Me acuerdo que cuando Maca tenía meses de nacida, yo le hablaba mientras cocinaba, le mostraba la espátula, ella la cogía, la mordía… Y así con todos: en la silla de comer les ponía verduritas para que vayan probando, que aprendan a desgranar arvejitas, a cortar con un cuchillo sin dientes; les daba a probar e romero para que lo diferencien de la salvia, etc.
Yo creo que es súper importante porque desarrollan el gusto, juegan con las formas, las texturas, desarrollan la motricidad fina, entre otras capacidades. Prefiero que estén en la cocina a que estén en un cuarto lleno de juguetes.
Actualmente vives en Chile. ¿Cuéntanos qué haces por allá?
Vivo con toda mi familia en Santiago hace un año, porque mi esposo trabaja en una multinacional y lo han mandado para allá. Estamos contentos con la experiencia porque estamos acostumbrados a movernos: hemos vivido en Brasil, Colombia (donde nacieron mis hijos), Estados Unidos y México. Macarena ha estado en cinco colegios, pero no le cuesta adaptarse cada vez que va a un lugar nuevo, hace amigos nuevos rápidamente.
Yo doy clases de cocina en una escuela que se llama Verónica Blackburn, que es una casa enorme donde venden cosas de cocina súper bonitas. La cocina es increíble, llena de cosas de cobre. Cada vez que voy allí me siento como Julia Child en una cocina.
Enseñas a cocinar en la TV, en esta escuela en Chile, también enseñas a través de tu blog y las redes sociales, ¿qué placer encuentras en enseñar?
Es lo que más me gusta. Enseñar trasciende porque se comparte el conocimiento, y disfruto cuando alguien me dice: “el keke que me enseñaste me quedó increíble”, “ahora ya sé hacer un risotto” o “finalmente puedo prepararle a mi hija su torta de cumpleaños”. Es muy gratificante.
RECETAS PARA PAPÁ
Milhojas de langostinos
Para 2 personas
Ingredientes:
120 gramos de masa hojaldre
1 huevo
1 cucharada de semillas de ajonjolí
Relleno:
1 cucharada de mantequilla
1 cucharada de aceite de oliva
1 diente de ajo entero
12 colitas de langostinos
1 cucharada de dill o eneldo fresco picadito
Sal, pimienta
Espinacas:
2 cucharadas de aceite de oliva
1 diente de ajo entero
200 gramos de hojas de espinacas
10 tomates cherry
Sal, pimienta
½ taza de crema de leche
¼ de taza de queso parmesano rallado
Ramitas de dill o eneldo para decorar
Estirar la masa hojaldre y cortarla en cuadrados
Preparación:
Hacerle cortes a los lados, pero solo cortar hasta el fondo en dos extremos que se miren uno frente al otro. Pintar con huevo batido y unir para que se entrecrucen y darle la forma al milhojas. Cerrar muy bien y presionar para que la masa esté exacta. Pintar con huevo por encima y echarle semillas de ajonjolí. En la parte del medio (donde va a ir el relleno) se hacen rayitas con el cuchillo para que esa parte infle menos.
Poner los milhojas en una lata para hornear con silpat y congelar por 20 minutos antes de hornear, o tapar con film y dejar congelado por días o semanas.
Justo antes de servir se meten al horno a 350 grados F. /180 grados C. Para que inflen y se cocinen, deben quedar doraditos, aprox. 20 minutos.
Relleno:
Saltear los langostinos previamente limpiados (sacar carcasas y venita). Calentar en una sartén el aceite de oliva y la mantequilla, agregar un diente de ajo y cuando está bien caliéntese echan los langostinos y se dejan quietos por unos segundos para que doren. Darles vuelta para que se doren del otro lado. Agregar el pisco y flambear. Echar sal, pimienta y dill fresco picadito. Sacar del fuego para que no se recocinen, ya que comer mariscos secos y duros, no es rico.
En la misma sartén agregar otro chorrito de aceite de oliva, el mismo diente de ajo y saltear las hojas de espinacas con sal y pimienta. Se cocinan muy rápido. Apenas estén tiernas, poner los tomates cherry cortados en mitad y echar la crema de leche (puede ser también leche evaporada o leche de coco ¡que es deliciosa!). Hervir por 2 minutos y echar los langostinos. Al final, echar el queso parmesano. Rellenar con esto los milhojas al momento de servir y decorar con unas hojas de eneldo fresco.
Se junta todo justo antes de comer para que el hojaldre no se ponga aguado.
Mini pyes de maracuyá
Para 5 personas
Ingredientes:
Masa:
160 gramos de harina sin preparar
115 gramos de mantequilla con sal, fría y cortada en cubitos
60 gramos de azúcar en polvo cernida
Pizca de sal
Ralladura de 1 limón
Relleno:
1 lata de leche condensada
1 chorrito de esencia de vainilla
2 yemas
¼ de taza de jugo de maracuyá concentrado (sin agua)
Merengue suizo:
100 gramos de claras
200 gramos de azúcar blanca
Para decorar unas pepitas de maracuyá
Preparación:
Masa: mezclar todos los ingredientes con la mano hasta formar un arenado. Luego presionar y formar una masa. Reposarla tapada con film por 30 minutos en la refrigeradora.
Forrar los 5 moldes de aro con papel aluminio. Estirar la masa con un poco de harina usando un rodillo cortar con cuchillo y forrar los moldes. La masa debe quedar delgada. Refrigerar los 4 moldes por 15 minutos antes de hornear. Hornear a 300 grados F. por 12-15 minutos.
Relleno: poner la leche condensada en un tazón. Echar la vainilla y las yemas pero usando un colador. Mezclar bien. Agregar el jugo de maracuyá y mezclar bien. Repartir el relleno entre los 5 moldes
Merengue suizo: se ponen las claras y azúcar en el tazón de la batidora, a baño maría. Mezclar rápidamente y luego se deja ahí, calentándose con el vapor del baño maría. Ir moviendo cada tanto y dejar hasta que el azúcar esté disuelta y la mezcla esté tibia.
Batir en la batidora a velocidad media (no en la más alta) hasta que enfríe, aprox. 10 minutos. No batirlo en exceso porque se pone muy duro el merengue.
Con una manga y usando la boquilla redonda hacer los picos sobre cada mini pye.
Hornear 30 minutos a 200 grados F.
Cuando salen del horno se enfrían y se ponen pepitas de maracuyá sobre el merengue.
Brownie trufado
Para 6 personas
Ingredientes:
Brownie:
125 gramos de margarina
60 gramos de chocolate bitter
1 cucharada y media de cocoa
180 gramos de azúcar rubia
2 huevos
Un chorrito de vainilla
120 gramos de harina sin preparar
Pizca de sal
¼ de taza de pecanas tostadas y picadas
* Molde rectangular forrado con papel manteca
Trufa:
150 ml. de crema de leche fresca
1 cucharadita de glucosa
150 gramos de chocolate bitter
1 cucharadita de mantequilla sin sal
Frambuesas frescas para decorar
Florcitas, menta fresca
Preparación:
Brownie: derretir la mantequilla en ollita y cuando está a medio derretir, agregar el chocolate en trocitos. Mezclar con batidor. Echar cocoa, reservar. Que entibie, pero que no enfríe mucho.
En un tazón mediano poner azúcar, huevos, vainilla y batir poquísimo con batidor de mano. Si se bate mucho, la mezcla de brownie va a parecer un queque. Echar la mezcla tibia de chocolate, la harina con sal, todo junto y las pecanas. Mezclar rápido y poner en el molde.
Echar en molde con papel manteca, con brocha poner mantequilla y harina.
Hornear a 350 grados F. por 15-18 minutos. Que se vea que en el medio sigue un poco húmedo.
Desmoldar, quitar el papel manteca y cortar con el molde de aro para obtener 6 pedazos.
Enfriar en una rejilla. ¡Guardar los restos para comer!
Trufa: dar un hervor a la crema de leche con la glucosa y apagar el fuego. Echar el chocolate picadito y mezclar con batidor de mano hasta que se derrita. Agregar la vainilla y vaciar en un tazón. Tapar con film y dejar que repose a temperatura ambiente por varias horas hasta que esté frio y con textura untable.
Al momento de servir se unta cada brownie redondo con la trufa (una capa gruesita) y encima se ponen las frambuesas. Decorar con florcitas y/o menta fresca.
¡Feliz Día del Padre!