Para frenar los rumores de una supuesta enemistad entre Meghan Markle y Kate Middleton, los duques de Sussex y Cambridge han decidido pasar la Navidad juntos en Sandringham House, con el resto de la familia real.
Durante semanas se especuló que el príncipe William y su esposa pasarían las fiestas con los Middleton en Bucklebury. Pero ahora se sabe que la pareja se unirá al resto de los Windsor —incluidos el príncipe Harry y Meghan Markle— para pasar la Navidad con la reina Isabel II.
Según informa People, los duques de Cambridge se quedarán en su residencia cercana de Anmer Hall con sus hijos, los príncipes George, Charlotte y Louis. Los detalles sobre dónde se alojarán Harry y Meghan aún se desconocen. Cabe precisar que este año también es probable que se una a las celebraciones la madre de Meghan, Doria Ragland, quien habría sido invitada por la propia reina.
La confirmación de la noticia llega en el momento oportuno. Los rumores que apuntan a una mala relación entre las cuñadas sobrepasaron los muros del palacio de Kensington el mes pasado, cuando se hizo pública la renuncia de la asistente personal de la duquesa de Sussex. Desde entonces no ha parado la avalancha de críticas en su contra.
Pero esta no es la primera vez que los medios hablan de enemistad entre royals. Repasamos algunas de las desavenencias más sonadas.
Letizia y Sofía: duelo de reinas
La tensa escena que protagonizaron la reina Letizia y su suegra en la misa de Pascua, en la catedral de Palma de Mallorca, fue la más comentada de este 2018. La emérita quería fotografiarse con sus nietas pero la esposa de Felipe VI obstaculizó el posado. Rápidamente, la prensa inmortalizó tan bochornoso incidente que revelaba la mentada rivalidad entre las monarcas.
En los días posteriores fuimos testigo de diversos gestos de reconciliación, como la vez que Letizia le abrió la puerta a doña Sofía cuando llegaban a visitar al rey Juan Carlos al hospital. O la visita al mercado en la misma isla, durante sus vacaciones de verano.
Sarah Ferguson y el duque de Edimburgo
Es legendario el enfrentamiento que mantuvieron a lo largo de los años el príncipe Felipe, consorte de la reina Isabel II, y la que fuera su nuera, Sarah Ferguson. Al parecer, este se ha ido desvaneciendo con el paso del tiempo. El escándalo que protagonizó la exesposa del príncipe Andrew y su asesor financiero John Bryan es cosa del ayer. Los royals se mostraron muy contentos en la reciente boda de Eugenia de York y Jack Brooksbank. Incluso posaron juntos en las fotos oficiales.
En una entrevista posterior, Ferguson habló maravillas del abuelo de sus hijas. Ella aseguró que le recuerda mucho de su padre.
Isabel II y Diana de Gales
Lady Di se integró a la familia real como la esposa modelo. Sin embargo, con el pasar de los días los Windsor fueron descubriendo que, en el fondo, el príncipe de Gales y su esposa no congeniaban en nada. Las discordancias del matrimonio se hacían cada vez más notorias y, finalmente, terminaron por afectar la relación entre Diana y su suegra. La soberana aceptó que ambos se divorciaran luego de que la madre de Harry y William ofreciera aquella polémica entrevista donde afirmó: “en mi matrimonio éramos tres”. Para Isabel II este fue el último acto de rebeldía que podía soportar, así que exigió que ambos se divorciaran.
Diana de Gales y Camilla Parker Bowles
Está más que acreditada por los hechos la enemistad entre la recordada princesa del pueblo y la actual esposa del príncipe Carlos. El biógrafo de Diana Spencer, Andrew Morton, cuenta cómo es que ella se presentó sin previo aviso en una fiesta que se celebraba en casa de Camilla. Lady Di le dijo a su rival que ya se había enterado de lo suyo con su marido, a lo que este le habría respondido: «Ya tienes todo lo que siempre quisiste. Tienes a todos los hombres del mundo enamorados de ti y dos preciosos hijos. ¿Qué más quieres?».
El príncipe Carlos y Andrew, duque de York
Se dice que los hermanos siempre han tenido una clara rivalidad. ¿El motivo? El duque de York buscaría siempre más protagonismo del que realmente necesita. A esto se suman distintos problemas, como el escándalo sexual en que estuvo envuelto en 2015 o las críticas que genera por sus peligrosas amistades.
María Teresa de Luxemburgo y Josefina Carlota
Todo indica que a la suegra de la gran duquesa de Luxemburgo no le agradaba nada su origen plebeyo. En 2002, María Teresa declaró públicamente que la soberana quería destruir su matrimonio. Fue más lejos aún y confesó que Josefina Carlota la llamaba despectivamente «la pequeña cubana».
Antoinette Grimaldi y la princesa Grace Kelly
Pero más allá de los rumores, una rivalidad bastante documentada en Europa fue la que enfrentó a la princesa Grace Kelly y su cuñada, Antoinette Grimaldi. La hermana mayor de Rainiero de Mónaco pretendió ser regente hasta que su hijo Cristian de Massy alcanzara la mayoría de edad. No obstante, su plan no funcionó. Su hermano ascendió al poder y se casó con la estrella de Hollywood. Entonces, empezó una campaña de intrigas contra la otrora artista, a la que acusó de no saber educar a sus hijas.
Además, se cree que la díscola princesa fue quien instigó la crisis con Francia de 1962, en la que Mónaco se enfrentó a Charles de Gaulle. Superado el incidente, Antoinette fue expulsada del principado. Tuvieron que pasar varios años hasta que la royal fuera perdonada.