Daphne Dunne se había convertido en la principal seguidora del príncipe en Australia, tras saludarlo personalmente en tres oportunidades. En su última visita a Sídney, Harry le presentó a su esposa.

El príncipe Harry ha heredado de su madre el carisma que despliega en cada aparición pública. Precisamente, en una de esas ocasiones en la que tuvo contacto con la gente, en 2015, fue que conoció a Daphne Dunne, una mujer que le robaría el corazón y que pronto la prensa bautizaría como su fan número uno.

Entonces el príncipe se encontraba de visita en la Ópera House de Sídney, en Australia. Al verla portando la medallas póstumas de su esposo, Albert Chowne, fallecido durante la Segunda Guerra Mundial, se detuvo a conversar con ella. Entre las distinciones que llevaba en el pecho destacaba la honorable Cruz de la Victoria, el máximo honor que entrega las Fuerzas Armadas Británicas a los combatientes.

Foto: @the_mountbatten_windsors

Tiempo después, Daphne relataría que la medalla premiaba el valor de su esposo, asesinado a manos de los japoneses en Nueva Guinea, en 1945. Al parecer, el hoy duque de Sussex se habría interesado en su historia. «Se acercó a mí y me dijo: ‘Sé lo que se significa'». A lo que la nonagenaria contestó: «Bueno, deberías». Tras un breve intercambio de palabras, el hijo menor de Diana de Gales le dio un beso en la mejilla y se despidió. Pero nunca la olvidaría.

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Segundo encuentro

Esta semana, los medios ingleses hicieron eco de una lamentable noticia. Tres días después de recibir una felicitación especial del nieto de la reina Isabel II por su cumpleaños 99, Daphne falleció. Ella partió en compañía de su hija, Michelle Haywood, y sus nietas, en el Hospital de Sídney. «Daphne se ha ido en paz», declaró un familiar cercano este lunes.

Luego de su primer encuentro, Harry y Daphne volvieron a verse hasta en dos ocasiones. En 2017, cuando el príncipe volvió al país más grande de Oceanía, esta vez a promocionar los Invictus Games, los juegos para militares inválidos o mutilados que él mismo fundó. Pese a la lluvia torrencial, Dunne no quiso faltar a la cita y soportó en primera fila las inclemencias meteorológicas.

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Pero apenas la vio, el príncipe se acercó a saludarla con un caluroso abrazo y un beso en la mejilla. “Realmente es un joven encantador y genuino, y se preocupa por los hombres y mujeres lisiados, está haciendo un trabajo fantástico apoyándolos”, dijo la viuda quien llevaba nuevamente las medallas de su esposo.

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El último encuentro

El año pasado, durante la visita de los duques de Sussex a Australia, Meghan Markle, que se encontraba en sus primeros meses de embarazo, conoció a la admiradora de su esposo. Harry se dirigió directamente a Daphne y después de ubicarla le dijo: «¿Cómo estás? Voy a decirle a mi esposa que venga a saludarte». Al presentarse, la duquesa manifestó: «Oh, Dios mío, ¿eres Daphne? Estoy muy feliz de conocerte al fin. He oído muchas cosas buenas de ti». 

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Emocionada, la anciana felicitó a la pareja real por su boda y próxima paternidad. «Son maravillosos. Felicitaciones. El príncipe Harry será un padre maravilloso. No dejará que nada se interponga en su camino y será amable y cariñoso». El hijo de Charles de Inglaterra aprovechó el instante para lanzar elogios a la señora Dunne, quien sorprendía con renovado cambio de look. Al despedirse, Meghan deseó un nuevo encuentro, confiando en que sería con la familia completa. “Esperemos que la próxima vez que nos veamos tengamos a nuestro pequeño con nosotros”, le dijo sin saber que no volverían a verse. 

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