Meghan Markle dice que el Palacio de Buckingham está detrás de la decisión de cambiar el certificado de nacimiento de Archie. No acompañará a Harry a Londres.
Por Alejandra Grau
Meghan Markle está intentando dejar las cosas claras con respecto a los cambios realizados en el certificado de nacimiento de su hijo Archie.
El día de ayer, Meghan Markle y el príncipe Harry fueron acusados de «embelezar» el certificado de nacimiento de su hijo Archie. Y es que en el certificado de nacimiento original, Meghan se inscribe como Meghan Rachel (de hecho, fue en ese momento que muchos de sus seguidores supieron el verdadero nombre de pila de Markle).
Sin embargo, una copia actualizada del documento, obtenida por el diario The Sun, del Reino Unido, muestra que Markle editó el certificado aproximadamente un mes después del nacimiento de Archie Harrison Mountbatten-Windsor, el 6 de mayo de 2019, eliminando «Rachel Meghan» y remplazándolo con «Su Alteza Real la Duquesa de Sussex».
El príncipe Harry, de 36 años, también agregó «Príncipe» al documento para completar su título de «Su Alteza Real el Príncipe Henry Charles Albert David, Duque de Sussex».
Esto ha hecho ver a la pareja como hipócritas, ya que la inscripción de los títulos se realizó días antes de que los Sussex anunciaran que romperían los lazos con la organización benéfica que compartían con Kate Middleton y el príncipe William, en medio de rumores de una ruptura entre los hermanos y sus esposas, y a semanas de que renunciaran a ser miembros «senior» de la realeza.
La defensa de Meghan
En un comunicado el domingo, un portavoz de la duquesa de Sussex, de 39 años, dijo que la omisión de su nombre de pila, “Rachel Meghan”, en los papeles de nacimiento de Archie fue un pedido realizado por el Palacio de Buckingham.
“El cambio de nombre en los documentos públicos en 2019 fue dictado por Palacio, según lo confirmado por documentos de altos funcionarios de Buckingham. Esto no fue solicitado por Meghan, la duquesa de Sussex ni por el duque de Sussex”, se lee en el comunicado.
Meghan no acompañará a Harry al Reino Unido
Mientras tanto, el pasado sábado, se revelaron los planes de viaje de verano de Harry a Londres.
Según ha trascendido, Harry volará a la capital británica en junio para asistir a la fiesta de cumpleaños número 100 de su abuelo, el príncipe Phillip, a la ceremonia Trooping of the Color, entre otras festividades de Estado, así como a la tan esperada inauguración de una estatua en memoria de Diana en el Palacio de Kensington en julio. Se espera que Meghan y Archie permanezcan en la casa de la pareja en Los Ángeles.
La respuesta de los Sussex, es que el que Meghan no viaje no se debe a ningún resentimiento (de los cuales, sin embargo, se dice que hay muchos). Las fuentes le dijeron al diario inglés Daily Mail que ella no asistirá por razones «personales y prácticas».
Pero según otras fuentes, a la Familia Real le preocupa que la participación de la pareja en los eventos oficiales más importantes y tradicionales pueda restarles valor.
“Se debe enfatizar fuertemente que todavía hay un elemento de incertidumbre sobre los protocolos a la impredecible situación de COVID. Por todo esto, está casi confirmado que el duque regrese [a Gran Bretaña] por su cuenta”, dijo una fuente. «Esta es una decisión personal y práctica de la pareja, pero ciertamente ayudaría a los funcionarios de Palacio a torear lo que probablemente sea una situación bastante complicada».
¿Un dilema para el príncipe?
Otra fuente ha declarado: “Su Majestad dejó muy claro cuando dejaron el Reino Unido que Harry y Meghan todavía eran miembros muy queridos de su propia familia y que serían bienvenidos a asistir a eventos familiares. Eso sigue siendo cierto. Sin embargo, sí se requiere la necesidad de cierta diplomacia. Todavía hay una gran distancia entre Harry y muchos miembros de la familia, particularmente su hermano. Nadie quiere que se vuelva a repetir una situación como la misa del «Commonwealth Service», donde la frialdad entre ambos hermanos era evidente. Eso hiere a la imagen de la Corona».
Efectivamente, durante la misa en la Abadía de Westminster el año pasado por la celebración del Commonwealth, Harry y Meghan parecieron ser desairados con frialdad por el príncipe William y su esposa Kate Middleton, la primera vez que las parejas se veían desde Megxit.
Este verano será la primera vez que Harry vea a su familia desde principios de marzo, oportunidad en la que no trajeron a Archie con ellos. La familia no ha visto al niño desde que tenía seis meses.
«Harry quiere volver para los grandes cumpleaños de la reina y el príncipe Felipe», dijo una tercera fuente al Daily Mail. “Pero parece probable que sea solo él quien asista a futuro. Si Meghan regresa, la sensación es que eclipsaría la ocasión. La gente solo estaría mirando el ‘drama’ de todo lo que su presencia representa. Por supuesto que sería bienvenida, pero la decisión de no venir esta vez ha pospuesto ese dolor de cabeza al menos por un tiempo».
Se espera que Harry se quede en Frogmore Cottage en Windsor, la casa que él y Meghan decidieron mantener como base en el Reino Unido.