Mientras firmaba los documentos en su ceremonia de proclamación, Carlos III tuvo un gesto peculiar que mucha gente consideró «déspota».
Por Sergio Herrera
La ceremonia de proclamación de Carlos III como el nuevo rey de Gran Bretaña fue un momento emocionante para el país europeo. Pero no estuvo libre de polémicas. Mientras firmaba los documentos oficiales, el hijo de Isabel II realizó un gesto peculiar con los asistentes que se encontraban en el salón. Rápidamente, el detalle se viralizó en redes sociales a través de publicaciones y memes ingeniosos. Pero, ¿qué hizo el Rey para llamar la atención?
«The servant must clear my desk for me. I can’t be expected to move things.» pic.twitter.com/0pZqY2Xopq
— Laura Kuenssberg Translator (@BBCLauraKT) September 10, 2022
Sentado en el escritorio y con un lapicero en la mano, Carlos miró a uno de sus asistentes y agitó una de sus manos para que le despejaran la mesa. Así, podría avanzar con la firma que establecía el protocolo. «El sirviente debe limpiar mi escritorio. No se espera que yo mueva cosas», ironizó al respecto la periodista de la BBC, Laura Kuenssberg a través de Twitter.
Las manías de Carlos III
El chef real que atendía a Carlos III cuando era príncipe de Gales, reveló que el nuevo monarca tenía una obsesión con la cantidad de ciruelas que le servía en el desayuno.
Cabe destacar que el rey Carlos III ha sido criado desde su nacimiento con un séquito de ayudantes que cumplen con sus actividades domésticas. Es conocido que el monarca no está acostumbrado a las tareas mínimas e incluso, tiene ciertas obsesiones con sus rutinas. Por ejemplo, en el documental Serving the Royals: Inside The Firm, Paul Burrel, el ex mayordomo de Lady Di, hizo revelaciones sobre las manías de Carlos. «Su pijama se plancha todas las mañanas, al igual que los cordones de sus zapatos. El tapón de la bañera tiene que estar en una posición determinada y la temperatura del agua tiene que ser simplemente tibia».
Si esto resulta sorprendente, lo siguiente es aún más revelador. Según Burrel, el actual monarca del Reino Unido nunca toca los envases de pasta dental para lavarse los dientes. Sus ayudantes de cámara deben dejar 2,5 centímetros de dentífrico sobre su cepillo todas las mañanas. Esta instrucción siempre debe cumplirse antes que Carlos se dirija al baño.
El chef real del Príncipe de Gales, Darren McGrady, también aportó datos sobre qué prefiere el Rey para el desayuno. «La instrucción era colocar dos ciruelas y un poco de jugo en el tazón y enviárselo para el desayuno. Le mandaba dos ciruelas y él dejaba una para que volviera a mis manos y yo la regresara al frasco. Una mañana pensé en ponerle solo una. La envié al comedor, me mandó a llamar y me preguntó: «¿Tienes dos por favor?» Así que tuve que seguir enviándole dos cada mañana y me devolvía una», explicó McGrady.
Un libro que detalla estas obsesiones
Muchas de estas particulares manías se conocen por los pedidos de Carlos cuando viaja al extranjero. Sus giras tienen una serie de solicitudes extrañas que reflejan la personalidad del nuevo rey de Inglaterra. Esto según el adelanto de la nueva publicación de la periodista Tina Brown. En el libro que saldrá a fines de setiembre, la autora relata que el ex príncipe de Gales envía a su cama, muebles e incluso fotos de adornos un día antes de salir hacia su destino. De hecho, cuando este año viajó a Canadá por una de las actividades oficiales del Jubileo de Platino, tuvieron que trasladar la cama ortopédica que utiliza, su asiento del inodoro y rollos de papel higiénico Kleenex Velvet.
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