Con el lema «Un solo Perú: no más cuerdas separadas», este 29 de noviembre se dará inicio en Paracas a CADE Ejecutivos 2017. Conversamos con Drago Kisic, presidente de la cumbre, quien nos detalla los ejes de la reunión, en la que se darán cita empresarios, académicos y políticos peruanos y extranjeros.
Por Dan Lerner / Foto de Erick Andía
El economista Drago Kisic ha recibido la misión de encabezar la CADE Ejecutivos por segunda vez en su carrera, un reto que asumió debido a su probada vocación de servicio. Conversamos con él en su oficina en Macroconsult, donde nos brindó algunas luces de lo que será esta edición de la cumbre.
Usted ha sido presidente de la CADE Ejecutivos en 1996, y tengo entendido que no es común hacerlo dos veces.
Creo que es la primera vez que pasa, en efecto. Es porque esta vez Julio Luque, el presidente de IPAE y, en general, el Consejo Institucional –ya que somos los expresidentes de IPAE–, pensamos que esta CADE había que diseñarla muy en casa. Normalmente invitamos a un empresario o un académico para que presida la CADE, pero esta vez estamos haciendo una propuesta de IPAE al país de seis temas que creemos que deben trabajarse muy intensamente de acá al bicentenario. Por eso es que Julio Luque me pidió que lo ayudara presidiendo esta edición, y, como a mí me gustan estas cosas, acepté.
El lema de esta CADE Ejecutivos es “Un solo Perú: No más cuerdas separadas”. ¿A qué se refiere?
Lo que pasa es que ha habido, en los últimos años, esta fantasía de que mientras la economía fuera bien, todo lo demás se iría acomodando automáticamente, y vemos que obviamente no es así. Si no hay buena política, si no hay armonía social, si hay corrupción, conflictos entre poderes, no puede haber una buena economía. Se paran las inversiones extranjeras y el país se frena, que es lo que nos está pasando. Eso es algo que en una sesión va a ser evaluado por Elmer Cuba, quien mirará a diez años, y hará una especie de proyección en la que nos dirá que, si seguimos así, con esta inercia, nuestro crecimiento va a ser más bien mediocre. ¿Qué tenemos que hacer para que eso no ocurra? Ahí viene otro panel, que es novedoso y que se presenta por primera vez en CADE, que es el de desarrollo territorial. También tendremos a Claudia Cooper, la ministra de Economía, que nos hablará más de la coyuntura, de cómo reactivar la inversión pública y también la privada. Estará, además, la primera ministra Mercedes Aráoz, quien expondrá sobre la informalidad y los planes del gobierno para reactivar la economía. La primera sesión es la del presidente del BCR, Julio Velarde, a quien hemos pedido una reflexión sobre el tema específico de por qué, a pesar de que no debe haber cuerdas separadas, la economía sigue siendo fundamental. Viene también Liliana Rojas, quien nos contará un poco cómo nos ven desde afuera, de manera que dejemos de creernos el ombligo del mundo.
Es cierto que ha habido una tendencia a mirar solo lo bueno del crecimiento peruano, cuando en realidad también hubo mucho que se hizo mal, cuyas consecuencias vemos ahora, ¿no?
Sí, es que las cosas cambian. Hemos tenido un buen periodo, pero nos está fallando nuestra institucionalidad, que es otro tema que va a tocar Fernando de Trazegnies: ciudadanía e institucionalidad como base de la República. Hugo Neira hablará del proceso de mestizaje, porque somos un país mayoritariamente mestizo, ya no estamos tan divididos, por lo que le hemos pedido que nos responda a la pregunta: ¿cuál es la promesa de la vida peruana en el siglo XXI? Basadre lo hizo para el siglo XX, pero la promesa parece no haberse cumplido en estos doscientos años. Es difícil responder en diez minutos, pero igual es muy interesante.
Es un poco la pregunta que usted mismo ya se ha planteado en ocasiones anteriores: ¿Cómo encontrar nuestra identidad colectiva?
La nueva clase media, que ha surgido gracias al éxito de la economía de mercado, y de la que habla Alberto Vergara en su libro “Ciudadanos sin República”, es un grupo de ciudadanos que tiene poder adquisitivo, pero no tiene justicia, no tiene Estado, seguridad social, buena educación. Contrasta con lo que era el comienzo de la República, y que analizó Alberto Flores Galindo, llamándonos una república sin ciudadanos. Por eso hemos querido armar una CADE que mire un poquito por encima de la coyuntura.
Si bien esta CADE mirará por encima de la coyuntura, también nace de la coyuntura, ¿no? Usted ha dicho que esta es una CADE muy importante porque ha sido un año muy difícil para el país.
Sí, por el fenómeno de El Niño y sobre todo por el problema de la corrupción. Justamente hay dos paneles que tocan ese tema. Uno lo integrará Brian Winter, que es el vicepresidente del Consejo de las Américas, y que nos hablará de la corrupción a nivel internacional, del caso Lava Jato; además de Rolando Arellano, quien nos hablará de la pequeña corrupción, la de todos los días; y, por último, Nelson Shack, el contralor de la República, que tiene una nueva propuesta para el sistema de control en el Perú. El segundo panel tendrá que ver con la corrupción en la prensa: ¿cuáles son los límites del rating? Estará Juan Luis Cebrián, de España, además de otros empresarios, que son al final los que financian a los medios.
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