Once menores y siete cuidadoras del programa social resultaron con síntomas de intoxicación en Chiclayo, lo que reabre cuestionamientos sobre la supervisión del MIDIS en la calidad de los alimentos entregados por el Estado.

Por Daniel Crespo Pizarro

Una nueva alerta sanitaria ha puesto en el centro del debate la gestión del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (MIDIS). Once menores y siete cuidadoras del programa Cuna Más, que brinda atención a cerca de 170 mil familias en todo el país, presentaron síntomas de intoxicación luego de consumir alimentos en un centro de atención de Cayaltí, Lambayeque.

El hecho ocurrió el 19 de mayo, cuando tras el almuerzo los centros de salud del distrito recibieron a los menores y al personal afectado con malestares estomacales, náuseas y diarrea. De acuerdo con el responsable regional de Cuna Más, ese día 172 niños recibieron alimentos del programa. Como medida preventiva, se suspendió temporalmente la entrega de alimentos en toda la región.

Cuna Más emitió un comunicado en el que aseguró que los platos fueron preparados con alimentos frescos y descartó el uso de productos enlatados. Sin embargo, lo sucedido vuelve a poner sobre la mesa las dudas sobre los mecanismos de control del Estado en la compra, distribución y supervisión de los insumos utilizados en programas sociales dirigidos a la infancia.

A través de un comunicado, Cuna Más descartó el uso de enlatados.

A raíz del reciente caso en Lambayeque, el gerente regional de Salud, Yonny Ureta Núñez, detalló que los afectados señalaron haber consumido alimentos del programa Cuna Más antes de presentar los síntomas. De igual forma, el funcionario sugirió que la gestión de la alimentación de poblaciones vulnerables y escolares pase del gobierno central a los gobiernos regionales. Considera como alternativa regresar al sistema anterior, en el que se cocinaban los alimentos en las mismas zonas donde se servían.

Ante lo ocurrido, la Dirección Ejecutiva de Salud Ambiental (DESA) anunció una investigación a fondo para determinar el origen preciso de la posible contaminación alimentaria. El gerente regional de Salud expresó su preocupación, señalando que este caso se suma a una serie de episodios similares registrados en la región.

De acuerdo con el responsable regional de Cuna Más, ese día 172 niños recibieron alimentos del programa.

Suman los casos de intoxicación

Este caso se suma a otros reportados en semanas previas. A inicios de abril, cerca de 80 escolares en Piura resultaron intoxicados tras consumir productos del programa Wasi Mikuna, diseñado como reemplazo de Qali Warma. En total, más de 120 estudiantes de regiones como Áncash y Amazonas presentaron cuadros similares. Estas situaciones derivaron en el inicio del proceso de extinción de Wasi Mikuna y en una interpelación a la ministra Leslie Urteaga en el Congreso de la República.

Más allá de los nombres de los programas, lo ocurrido con Cuna Más plantea una preocupación persistente frente a la gestión del Ministerio de Inclusión Social y el gobierno central.

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