El responsable del atentado, Miguel Ángel Requejo Astochado, permanece detenido tras dejar a cuatro personas hospitalizadas. Una de ellas tiene presenta la costilla luxada.
Por Alejandro Saldaña
Lo que comenzó como una tranquila velada la noche del miércoles 2 de julio en un restaurante de La Molina terminó en una escena de caos y terror. Una camioneta irrumpió violentamente por una de las ventanas del local, arrollando a varios comensales y dejando al menos cuatro personas heridas. Testigos describieron momentos de pánico: gritos desesperados, mesas volcadas y cuerpos arrastrados por el vehículo, que atravesó el salón sin detenerse. Mientras crece la indignación ciudadana, la pregunta que queda es: ¿qué ocurrió exactamente aquella noche en La Molina?
Según el parte policial, la secuencia de los hechos comenzó cerca de la medianoche, cuando el empresario Miguel Ángel Requejo Astochado, gerente de Miromina S.A. —acompañado de su esposa—discutió con el personal del local tras excederse en el consumo de alcohol. Al ser invitado a retirarse por su conducta, regresó minutos después al volante de su vehículo y embistió con fuerza la fachada del restaurante justo cuando tres clientes se disponían a levantarse de su mesa.
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Minutos antes, un grupo de comensales tuvo una discusión verbal con Requejo debido a su comportamiento errático. Las cámaras de seguridad registraron el momento en que, antes de ser retirado del restaurante, este se acerca corriendo hacia ellos y empiezan una pelea a golpes que termina en el suelo, con los demás clientes y miembros del personal tratando de separarlos. Minutos después de ser retirado del local, volvió y destruyó la fachada del restaurante con su vehículo, atropellando a las personas con las que había tenido el altercado.
El impacto no sólo rompió vidrios y marcos metálicos, sino que arrastró a los comensales varios metros junto a las mesas que quedaron destrozadas. Durante la madrugada se reportó que, entre los afectados, solo uno de ellos sufrió mayores daños y tenía una costilla luxada, por lo que permanecía en observación debido a una posible hemorragia interna. Los demás atropellados se recuperan sin riesgo mortal.
«El charrúa» quedó así después del atropello de Miguel Ángel Requejo Astochado.
Agentes de la Policía Nacional del Perú acudieron de inmediato al lugar para levantar evidencias y recabar testimonios. Según el parte preliminar, el conductor presentaba signos evidentes de ebriedad, por lo que fue detenido y trasladado a la comisaría de Santa Felicia, donde permanece a disposición del Ministerio Público mientras se evalúan las medidas restrictivas correspondientes.
El indignante historial de Miguel Ángel Requejo
Miguel Ángel Requejo Astochado no es un desconocido en el ámbito empresarial limeño. Graduado en ingeniería mecánica y con un máster en dirección y gestión empresarial, lidera la firma Miromina S.A., dedicada a la industria del acero. Sin embargo, más allá de su educación, Requejo tiene un grave incidente en su historial civil.
Miguel Ángel Requejo Astochado permanece detenido en la comisaría de Santa Felicia.
En 2023, Sucamec sancionó a Requejo tras detectar un examen psicológico falsificado en su solicitud de licencia para portar armas de uso civil. Aunque esta irregularidad derivó sólo en una sanción administrativa, sirvió para documentar un antecedente que ahora es revisado por la Fiscalía como parte de este nuevo expediente.
Tras su detención, el empresario quedó bajo la autoridad del Ministerio Público, que analiza su estado de ebriedad, su conducta intencional y la posibilidad de nuevas denuncias por parte de los afectados. Las próximas horas serán clave para determinar si recibe prisión preventiva o alguna otra medida cautelar mientras avanzan las diligencias policiales y judiciales.
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