MacKenzie Bezos, la tercera mujer más rica del mundo, se ha comprometido a donar la mitad de su fortuna. Así, se une a The Giving Pledge, campaña filantrópica iniciada en junio de 2010 por los multimillonarios estadounidenses Warren Buffett y Bill Gates que destaca la lucha por la igualdad, la investigación contra el cáncer y las donaciones para asistir a inmigrantes.
MacKenzie Bezos se llevó los reflectores durante su divorcio tras 25 años de matrimonio con Jeff Bezos, el billonario fundador de Amazon. Los medios no podían evitar hablar sobre ella, su tormentoso divorcio y, especialmente, sobre la cantidad de dinero que consiguió al culminar el procedimiento legal: más de 36 mil millones de dólares.
A pesar de haber entrado al ojo de la tormenta como consecuencia de su relación marital, la escritora estadounidense ha decidido dejar su propia huella. Dentro del ámbito filantrópico, ha firmado en Giving Pledge. La iniciativa —a la que curiosamente no se ha sumado Jeff Bezos, el hombre más rico del mundo— es liderada desde hace más de una década por el «gurú tecnológico» Bill Gates y el empresario Warren Buffett.
The Giving Pledge, en español «La Promesa de Dar», es una campaña filantrópica iniciada en junio de 2010. La página web oficial explica que la organización “es un esfuerzo para invitar a las personas y familias más adineradas de América a que se comprometan a donar la mayor parte de su fortuna con fines filantrópicos”.
La promesa de Bezos
En la carta que firma su compromiso, MacKenzie Bezos afirma que donará su fortuna “hasta que la caja fuerte esté vacía”. A pesar de asegurar que la filantropía es un proceso que toma tiempo y esfuerzo, dice que no va a esperar más para poner a funcionar los 36.600 millones de dólares en los que se estima su patrimonio actual.
Tal cantidad de dinero la obtuvo tras la solución «amistosa» a la que llegó con su exesposo para consumar el divorcio. MacKenzie se quedó con una cuarta parte de las acciones que tenían en Amazon, la compañía que ambos crearon. Así, quedó como dueña del 4% de la compañía y cedió a Bezos todos los intereses en The Washington Post y en la compañía espacial Blue Origin.
MacKenzie también califica, en la carta, de “desproporcionada” la cantidad de dinero que posee tras su divorcio. Así, la considerada una de las mujeres más ricas del mundo, afirma que es «una firme creyente del principio de devolver a la sociedad lo que esta les ha dado». Sin dudas, ese es el principio base de la iniciativa de The Giving Pledge.
Durante su matrimonio creó -junto a su entonces esposo- un fondo de 2.000 millones para asistir a familias sin hogar y para financiar centros de enseñanza preescolar en comunidades desfavorecidas. La iniciativa fue anunciada el pasado setiembre, y bautizada como Day One Fund.
MacKenzie is going to be amazing and thoughtful and effective at philanthropy, and I’m proud of her. Her letter is so beautiful. Go get ‘em MacKenzie. https://t.co/S2gLLBQyRQ
— Jeff Bezos (@JeffBezos) May 28, 2019
En este contexto, y para no perder el brillo filantrópico, MacKenzie Bezos asegura, citando el libro The Writing Life —que le inspiró durante su etapa universitaria— que “cualquier cosa que no des libremente y en abundancia, se convierte en una pérdida”. Como respuesta, su exmarido aplaudió el anuncio, con un mensaje en el que se declara “orgulloso” de la iniciativa de su expareja.