La película protagonizada por Marta González de Vega, quien además es la guionista de las películas españolas más taquilleras de los últimos tiempos. Conversamos con ella, pero sobre todo con Melania y Marco, presencia peruana en el elenco. Para nuestra actriz, caminar por la alfombra roja fue cumplir un sueño de niña. Para nuestro actor, fue un gran motivo para darle una alegría al Perú.
Por Gabriel Gargurevich Pazos
Son las ocho de la mañana en el Perú, y Marco, Melania y Marta terminan de despertarme con su energía. El actor y las actrices parecen estar enamorados; siguen flotando en la maravillosa ola del estreno de la película que los ha llevado a caminar por la alfombra roja del Festival de Málaga. Allá, en Málaga, son las dos de la tarde, y los artistas anuncian que no disponen de mucho tiempo: deben salir a cumplir con sus obligaciones de estrellas de cine.
Desde el estreno de la película “De Caperucita a loba” no han parado de dar entrevistas y de participar en sesiones fotográficas para distintos medios españoles. “¡Todos querían hacerle fotos a Melania! Era un éxito entre los fotógrafos. Lo que pasa es que Melania es guapa, coqueta, ¡y sabe estar en una alfombra roja!”, dice Marco, orgulloso de su compañera de reparto. Su sonrisa es sincera, lo puedo ver en la pantalla. Los tres están sentados en un sillón del Airbnb en el que se quedarán lo que resta de su estancia en Málaga (la organización del festival los hospedó en el AC Hotel Málaga Palacio mientras duró el festival). Marta es la más apurada; de hecho, está ahí –en el Airbnb– de pura casualidad. “Tienes suerte”, me dice Marco.
¿Cómo no tenerla si Marta González de Vega es la guionista de esta película, que primero fue un libro, que ella escribió, y luego una obra de teatro, un monólogo que ella escribió e interpretó durante siete años en Madrid? ¿Cómo no tenerla si Marta González de Vega ha sido guionista –junto a Santiago Segura– de las películas más taquilleras en España de los últimos tiempos, como lo son “Padre no hay más que uno” y “A todo tren”, dirigidas por el afamado Santiago Segura, quien además actúa en “De Caperucita a loba”, junto a otros actores famosos de la comedia española como Berto Romero, David Guapo, José Mota y Martita de Graná? El nombre oficial de la película es “De Caperucita a loba en solo seis tíos”.
Según dice Marco, es “noventa por ciento española y diez por ciento peruana”; es una coproducción entre Perú –Tondero– y España –Bowfinger Pictures y Esto También Pasará Producciones–, dirigida por la nominada al Premio Goya Chus Gutiérrez, que llegará a los cines peruanos este seis de abril; y, por supuesto, es una película donde actúan Marco Zunino y Melania Urbina, dejando en alto el nombre del Perú.
Como Marta González de Vega es la más apurada de los tres y es la protagonista –su personaje también se llama Marta–, es a ella a quien entrevisto primero, al menos un ratito. Dice lo siguiente: “Cuando nos enamoramos, todas y todos somos un poco caperucitas y caperucitos, todos podemos caer en la extrema ingenuidad y en el patetismo. Pero mientras más patética eres, más potencial tienes de convertirte en loba, de reírte de ti misma, y en la risa está el poder. Es increíble cómo nos siguen pasando las mismas cosas que a los veinte años… Esta película está basada en cosas que me han pasado a mí, pero también a mis amigas. Y tiene que ver con un empoderamiento desde la alegría”.
Melania Urbina: The Lady in Red
Melania Urbina es la segunda más apurada. Ahora está sentada al lado de Marco (Marta ya se fue). Y es ella la que habla: “Mi personaje se llama Ana. Es una peruana que tiene un café bar muy exitoso en Madrid, punto de encuentro de Marta y sus amigas; Ana es una de las mejores amigas de Marta, más loba que caperucita; es la amiga más resuelta, la que quiere hacer reaccionar a Marta, la que anticipa sus metidas de pata; es la amiga que la apoya”.
El fastuoso vestido rojo que Melania vistió en la alfombra roja, “ tenía que ser diseñado por peruanos, era un evento internacional”, dice; es creación del atelier de García-Morilo. “Para el avant premiere en Madrid (el 30 de marzo), me va a vestir Yirko Sivirich”. No fue la primera vez que la actriz peruana participaba en el Festival de Málaga.
Hace dieciséis años, en marzo de 2007, fue premiada como la mejor actriz en la sección de cine latinoamericano del prestigioso evento, por su performance en la película de Francisco Lombardi “Mariposa negra”. Y esa vez tampoco fue la primera vez que Melania recibió una distinción internacional: su primer galardón se lo dieron en el 15° Festival de Biarritz, Francia, por el mismo filme, premiado además como mejor película en el Festival de Montreal, Canadá.
Pero ella estaba muy emocionada de regresar al Festival de Málaga. Dice: “Mi niña interior, esa que soñaba con ser actriz y caminar en alfombras rojas, estaba fascinada; el Festival de Málaga ha crecido muchísimo en todos estos años, y yo sentí que la fantasía, que el sueño que tenía de niña, por fin lo estaba cumpliendo.
Ahora estamos más tranquilos, pero hace unos días, antes, durante y después del estreno “De Caperucita a loba” hemos tenido que asistir a innumerables eventos, sesiones de fotos y entrevistas. Todo fue muy lindo, como un sueño, pero también muy intenso. Ahora estamos disfrutando de los últimos días del festival”.
Algo que le impresionó mucho fue la gran organización del festival, “una gran producción”. En el AC Hotel Málaga Palacio, por ejemplo, había una sección enorme de maquilladores y peinadores que preparaban a los actores para la alfombra roja, pero también para la clásica foto en el muelle de Málaga. Dice: “Quedé encantada por lo detallistas que fueron conmigo. Un maquillador me dijo que me iba a presentar a un fotógrafo para que me retrate, luego me dijo lo mismo un peinador, ¡y así surgió todo este tema de las fotos que dice Marco! Lo más lindo fue caminar por la calle principal de la ciudad y ver una exposición fotográfica donde había retratos de famosos directores, artistas españoles mostrando la Biznaga de Plata, ¡el mismo premio que gané yo! ¡Yo tengo uno igual en casa! Ahora lo voy a poner en el centro de mi sala cuando regrese a Lima, ¡jajaja!”.
Melania se refiere a la muestra del fotógrafo Eloy Muñoz, que convirtió la calle Larios en un paseo de las estrellas, en el marco del 26 Festival de Málaga, y que expone casi ochenta fotografías capturadas por el artista malagueño en las pasadas ediciones del certamen. “Fernando León de Aranoa aparece en una de las fotografías. Para mí es un honor y una alegría haber ganado el mismo premio que él (la Biznaga de Plata)”, dice nuestra actriz. Cabe mencionar que León de Aranoa es un reconocido guionista y director de cine español, ganador de al menos diez premios Goya; su reciente película “El buen patrón”, por ejemplo, ganó los premios a Mejor Película, Mejor Director y Mejor Guion Original.
Marco Zunino: Orgullo Nacional
Marco Zunino no está tan apurado como sus colegas, aunque sí tiene un compromiso que cumplir. Antes de empezar a hablar con él, desvía la mirada de la cámara de la computadora y anuncia, no sé a quién o a quiénes, que “llegaré quince minutos tarde, por favor, digan eso”. Entonces vuelve conmigo, me muestra una amplia sonrisa y responde a mi primera pregunta en relación con su atuendo, el día de la alfombra roja: “La idea del vestuario, de utilizar un polo con el escudo nacional hecho de mostacillas brillantes, surgió en una conversación que tuve con el diseñador peruano Yirko Sivirich. Me parece importante mostrar una cuota de peruanidad cuando debo asistir a eventos internacionales; es bueno para los peruanos sentirse representados; cuando yo era chico, me emocionaba mucho al ver a un famoso haciendo un gesto que representase al Perú, ya sea en un evento importante o dando entrevistas en la televisión internacional; esa misma alegría, ese mismo orgullo, es el que quiero transmitir a mis compatriotas”.
Nuestro actor dice que el planteamiento inicial era acompañar el saco negro con un pantalón y zapatos del mismo color, “pero yo sabía que el día del estreno íbamos a caminar mucho y no quería estar incómodo, así que me puse un jean y zapatillas”, y ahora puedo ver todos los dientes del actor en la pantalla de mi computadora, en la calurosa Lima. “Esa comodidad me hizo muy feliz. De todos modos, quedó claro que la estrella del outfit era el escudo”.
Mi segunda pregunta es la siguiente: ¿cómo quedan parados los hombres en “De Caperucita a loba?”. Marco se pone serio y responde: “Marta –el personaje principal– no se cree dueña de la razón y tampoco se pone en el papel de mujer victimizada. Es una mujer, en todo caso, que pasa de extremo a extremo: de creerle todo a un hombre a no creerle nada. Pero no es que los hombres en la película sean los desgraciados; este tipo de emociones las experimentamos tanto hombres como mujeres, cuando estamos en una relación, y tienen que ver con inventarse cuentos en la cabeza. A veces los hombres son muy claros, pero las mujeres no quieren escuchar, y viceversa. Hay una escena en la película donde se ve a la protagonista, luego de una noche con mi personaje, subida a un unicornio, cabalgando por la Gran Vía –avenida principal de Madrid–, y se cruza con otras mujeres que están en la misma situación, pero también hombres montando unicornios…”. Y ahora Marco vuelve a mostrar su sonrisa imbatible: “Eso es lo que pasa luego de una noche conmigo, pues: te despiertas en un bosque lleno de animalitos y unicornios”. Marco asegura que tanto hombres como mujeres se van a sentir identificados en esta película, y que se van a reír mucho. Porque, como dijo líneas arriba Marta González de Vega, esta película trata sobre la manera en que reírse de uno mismo empodera, ya no solo a la mujer, sino a los seres humanos. Marco dice: “Los seres humanos nos inventamos cosas que no existen, constantemente; la necedad es una de las grandes características del ser humano, ¡y lo peor de todo es que no nos damos cuenta!”.
Su personaje en “De Caperucita a loba” se llama Pedro, “no se específica en la película de dónde es”. Según las palabras de nuestro actor, Pedro es “un poco jiposo (de hippie), coge con Marta, la pasan bien, pero él solo quiere coger. A mí me costó decir algunas líneas de este personaje tan poco empático, tan duro, porque yo soy todo lo contrario… Por ejemplo, hay una escena donde se acaban de acostar y Pedro le pregunta a Marta: ‘¿Te gusta alguien?’. La película se llama «De Caperucita a loba en solo seis tíos»; bueno, yo soy uno de esos seis tíos”.
No es la primera vez que Marco Zunino asiste al Festival de Málaga; hace dos años estuvo ahí cuando se presentó la película “Las mejores familias”, del director peruano Javier Fuentes León. “Esta vez fue distinto. Fue muy lindo sentir la camaradería no solo de mis compañeros de reparto –dicho sea de paso, fue un honor dar entrevistas al lado de actores tan importantes en España como José Mota y David Guapo–, sino también de otros actores, directores, productores… Todos éramos gente queriéndose conocer, todos somos artistas, al final estamos en lo mismo. Y sí, claro, hubo fiestas; celebramos en la terraza del hotel AC, también en diferentes restaurantes, el centro de Málaga es pequeño, y ahí sucedía todo lo relacionado con el festival; hablamos de la reacción de la gente, de los críticos, muy necesario tomarse un trago después de tantas entrevistas y fotos, pero yo a la una de la mañana ya quería ir a la cama, estaba muerto”.
Antes de terminar la conversación, le pido a Marco una reflexión respecto a los huaicos e inundaciones que azotan al Perú. Dice nuestro actor: “Es como si volviéramos a vivir lo mismo y lo mismo. Tengo entendido que el Senamhi alertó al Gobierno de estas lluvias y no se le ha hecho caso. Es descorazonador. Los políticos ya no esconden su cinismo, les importa un carajo el pueblo que dicen defender. A veces me he sentido un poco culpable por postear fotos y videos del festival en las redes sociales, con todo lo lindo y glamoroso que es Europa, pero luego pienso que eso también puede alegrar a mis compatriotas, yo me alegraría. Además, he luchado muchísimo para llegar aquí, sin recibir ningún tipo de ayuda de los gobiernos peruanos; solo, gracias a mi trabajo, he conseguido dar declaraciones en nombre del Perú en “The New York Times”, en el “New York Daily”, en Univision, en el diario “La Reforma”, de México… A mí me da mucha pena que no se apoye más a nuestras artes desde el Estado, siendo un país tan rico culturalmente. A los políticos no les interesa apoyar las artes porque sensibilizan al pueblo. Pero las artes dan identidad y orgullo a un pueblo, y eso es un gran incentivo para seguir haciendo las cosas bien”.
Invitados de Honor: Películas peruanas premiadas en el festival
En el 26 Festival de Cine de Málaga, cinco películas peruanas fueron premiadas. El Perú fue invitado de honor, en la sección Latinoamerican Focus. La ópera prima de Leonardo Barbuy, “Diógenes”, se estrenó mundialmente en el Festival de Cine de Málaga, y fue reconocida con dos Biznagas de Plata, en las categorías de Mejor Película Iberoamericana y Mejor Dirección. La historia que cuenta esta película –una coproducción entre Perú, Colombia y Francia– se desarrolla en el poblado de Sarhua, Ayacucho, donde vive Diógenes (interpretado por Jorge Pomacanchari), junto a sus hijos menores, Sabina (Gisela Yupa) y Santiago (Cleiner Yupa), aislados de la comunidad. Con la producción de Illari Orccottoma, fue grabada en un cuidado blanco y negro.
La Biznaga de Plata al mejor largometraje en la sección oficial Cinema Cocina fue para el documental peruano “Hatun Phaqcha. Tierra Sana”, dirigido por Delia Ackerman. Los proyectos “4EBER”, de Ximena Valdivia, y “La otra orilla”, de Francesca Cánepa, recibieron los premios SANFIC y Films to Festivals, respectivamente, en el Málaga Festival Industry Zone (MAFIZ), la sección industria del festival. Y “Estados Generales”, de Mauricio Freyre, una película en etapa de posproducción, recibió el premio en el Málaga WIP – Work in progress. Cabe mencionar que “De caperucita a loba” no estaba en competencia.
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