El proyecto Laramie es una producción independiente que busca  invitar a la reflexión a través de una puesta en escena con teatro testimonial. A propósito de su estreno en nuestra ciudad, tras haber recorrido el mundo con el guión de Moisés Kaufman, conversamos con el director de la obra en el Perú, Jaime Nieto. 

Por María Alejandra López

En 1998, un crimen cometido en Laramie, Albany, conmocionó a todos los que habitaban la tercera ciudad más poblada del estado de Wyoming. Un chico de solo veintiún años había sido asesinado de una manera atroz: fue torturado por dos jóvenes de su misma edad mientras estaba atado a una cerca en un área remota. Nadie escuchó las súplicas de Matthew Shepard la madrugada del 8 de octubre e, incluso, su cuerpo fue encontrado con vida dieciocho horas después del brutal ataque. 

¿Por qué el crimen de Matthew Shepard conmocionó Laramie y llegó a capturar la atención de Madonna quien, incluso, invocó que se sancionara a los culpables lo antes posible? La respuesta está en que, según ahondaron las investigaciones posteriores al crimen, Shepard fue asesinado por su orientación sexual y fue azotado hasta la muerte solo por el hecho de ser homosexual. 

En honor a Matthew Shepard, se instauró entre los activistas LGBT el «Day of Silence» que se celebra cada 11 de abril.

El proyecto Laramie

A pesar del tiempo que ha transcurrido desde el caso, el crimen de Matthew Shepard aún es motivo de investigación -especialmente en torno a la legislación de los crímenes de odio-, así como para suscitar el debate sobre las minorías en diversas escuelas y universidades. Incluso, dos años después de lo ocurrido, el Tectonic Theater Project y su fundador, el dramaturgo venezolano Moisés Kaufman, concibieron una obra que gira en torno a lo ocurrido: El proyecto Laramie

La obra, escrita en el 2000, es el resultado de una investigación realizada por el dramaturgo en el lugar donde ocurrieron los hechos. A través de entrevistas a los ciudadanos de Laramie, el autor buscó ahondar en lo sucedido y encontrar los motivos detrás del terrible crimen, así como invitar a reflexionar al público a través de una obra que se desarrolla como un documental escénico. 

La obra se presentará hasta el 25 de septiembre en el Centro Cultural de la Universidad de Lima.

Gracias a El proyecto Laramie, la historia de Matthew Shepard ha viajado por varias ciudades del mundo: además de ser una de las obras más representadas en los Estados Unidos, también se ha presentado en Alemania, Francia, Italia, Polonia, Suiza, Portugal, la República Checa y más. Solo este año se presentó en España por primera vez y se presentará en Lima gracias a una iniciativa del Centro Cultural de la Universidad de Lima. 

En el Perú, la producción de esta obra -con el guión de Kaufman- está a cargo de la Universidad de Lima y de Jaime Nieto, director de la obra, quien tiene una vasta experiencia como dramaturgo y guionista. Además, la puesta en escena representa todo un reto para el elenco, quienes tendrán que interpretar a más de sesenta personajes que representan a los habitantes de Laramie.

El elenco de la obra está conformado por Ingrid Altamirano, Roberto Ruiz, Lía Camilo, Claudia Berninzon, Iván Chávez, Gianni Chichizola, Katia Salazar, y Bruno Espejo.

A propósito de la llegada de la obra al Perú, tuvimos la oportunidad de conversar con Jaime Nieto.

¿Cómo descubriste la historia de Matthew Shepard y la obra El proyecto Laramie?

Un día estaba haciendo zapping en la televisión y me detuve en HBO. Me conmovió la escena de una película: era el testimonio de un padre atribulado por la muerte de su hijo, brutalmente asesinado. La película finalizó a los diez minutos. Me interesó tanto que al averiguar el nombre descubrí que se llamaba El proyecto Laramie. Luego me enteré de que se trataba, en realidad, de una obra de teatro; y en un viaje a Nueva York compré el texto y me enamoré de él. Me impresionó demasiado el tratamiento documental de la obra. Así que decidí ponerla en escena.

¿Alguna vez habías realizado una obra con una temática tan fuerte como la que rodea esta puesta en escena?

Considero que el teatro no solo debe entretener, sino también generar una reflexión en los demás. Como espectador siempre busco una obra que me “mueva el piso” y me saque de mi zona de comfort. Es por eso que a la hora de escribir una obra o escoger el texto de un autor busco un texto que cuestione al espectador y que le permita salir del teatro pensando de manera diferente. En mis obras siempre he tocado temas como el desamor, el miedo a la muerte, el miedo a la soledad, la búsqueda del amor, el fracaso en las relaciones de pareja, la infidelidad, etc. Me gustan los dramas y las comedias fuertes.

Jaime Nieto ha realizado las obras «Carne Quemada (1995)», “Deseos Ocultos (1997)», “Adiós al Camino Amarillo”, “Tinieblas (2001)», “El dolor por tu ausencia (2004)», “Vecinos (2015)», entre otras

¿Cuál fue el proceso para que cada actor interpretará más de un personaje?, ¿cómo se desarrollaron los ensayos?

No fue fácil, pero fue un proceso arduo y a la vez divertido. Empezamos a construir a cada personaje a través de la elección de un elemento que lo caracterizara. Como estamos ante un tema muy serio -un crimen de odio- y se trata de un teatro testimonial, el segundo objetivo era lograr que los actores interioricen cada uno de los testimonios. No debía sonar grave ni sombrío, ya que teníamos que sacar de nuestra cabeza la idea de “estamos hablando de un tema serio” para hacer que los textos sonaran cotidianos. Lo importante era contar la historia de Matthew Shepard desde distintos puntos de vista. Y en eso nos pusimos a trabajar y por eso estoy contento con los resultados.

¿Qué tan importante es esta obra en un país donde aún persiste la homofobia?

En un país como el Perú, y en momentos donde se tocan temas como la Unión Civil o la penalización de los crímenes de odio, obras como “El proyecto Laramie” son muy importantes. Como artistas tenemos el deber de crear conciencia en el espectador. En el caso de este montaje, se pueden escuchar las opiniones que surgen sobre el tema de la tolerancia y los crímenes de odio; y creo que el espectador se siente muy identificado porque, definitivamente, encuentra una opinión similar en uno de los personajes. Todos tenemos que contribuir a que el Perú sea un país más tolerante hacia las minorías LGTBI y poner nuestro granito de arena para que las mentalidades negativas cambien. Poner en escena una obra como esta es un gran paso.

Las entradas para la obra se pueden adquirir en Teleticket de Wong y Metro.

¿Qué ha sido lo más difícil de lograr El proyecto Laramie? 

Lo más difícil fue conseguir los fondos para montarla. Al tratarse de una producción independiente, conseguir el dinero para pagar los derechos, el vestuario, y la escenografía, fue  bastante difícil. Felizmente, hemos tenido el apoyo del Centro Cultural Universidad de Lima, quienes prepararon -en paralelo- una exposición sobre la intolerancia.