La obra forma parte de la implementación del Plan Maestro, en el marco de las celebraciones del Bicentenario de la Independencia
Por Redacción COSAS
El monumento a la Victoria del Dos de Mayo mide más de 25 metros de altura y está realizado en piedra, mármol y bronce.
Cumpliendo con la programación anunciada, el alcalde de Lima, Jorge Muñoz, entregó a la ciudad el restaurado monumento a la Victoria del Dos de Mayo.
El monumento, que cuenta con más de 25 metros de altura y está realizado en piedra, mármol y bronce, está compuesto por una base mayor, un conjunto de rejas, un basamento principal, un pedestal, una columna (fuste, junta de proas, capitel) y la escultura principal de la Victoria alada.
Sobre la develación del monumento restaurado, el alcalde comentó: “La victoria americana, prefigurada en la diosa alada que corona con laurel y espada este monumento, que hoy vemos más radiante que nunca, nos recuerde perpetuamente, más aún en estos tiempos difíciles, la llama de la esperanza siempre encendida y la unidad como nación en busca del bien supremo. Renovamos aquí́, con el cielo como testigo, este año del bicentenario nacional, nuestro compromiso por construir una nación más justa, solidaria y feliz” afirmó Muñoz.
A su vez, el burgomaestre se dio tiempo para saludar el gran trabajo de restauración realizado en el monumento, y su especial significado en este momento de nuestra historia. “Durante ocho meses un grupo de 40 restauradores de la Municipalidad de Lima ha escrito nuevas páginas en la historia de este monumento. Esta vez no es un combate bélico, sino uno contra el abandono y la incuria de décadas que habían degradado este símbolo patrio”, manifestó.
Equipo de 40 restauradores que estuvieron a cargo del proyecto.
Monumento al triunfo
El monumento a la Victoria del Dos de Mayo fue edificado para rendir homenaje al héroe José Gálvez Egúsquiza y a los héroes del combate del 2 de mayo, el cual puso fin a la intromisión española en América y que significó la hermandad de los países de Perú, Chile, Ecuador y Bolivia. Fue elaborado por el arquitecto Edmundo Guillaume y el escultor León Cugnot, e inaugurado el 29 de julio de 1874 por el presidente Manuel Pardo.
La recuperación de esta escultura duró aproximadamente 8 meses y fue realizada por el equipo de restauradores de la Municipalidad de Lima. Este proceso consistió en un diagnóstico del estado inicial del monumento; así como un estudio histórico y artístico, con el fin de recuperar los valores originales, estéticos y monumentales. El diagnóstico incluyó también calas estratigráficas, monitoreo de temperatura y humedad; y el retiro de capas de pintura colocada a lo largo de los años.
Alcalde Muñoz presidió la ceremonia de develación del monumento a la Victoria del Dos de Mayo.
De esta forma, la recuperación de este monumento se suma a las más de 18 esculturas restauradas y entregadas a la ciudad de Lima, a pocos meses del bicentenario de la independencia del Perú.
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