¡Revisé el teléfono de mi novio mientras dormía! Vamos saliendo hace casi un año y realmente no me puedo quejar: es buenísimo, generoso, divertido y cariñoso. Hace unos días, aproveché que se quedó dormido mientras veíamos una serie para revisar su celular. No me considero una novia tóxica, pero un fuerte impulso se apoderó de mí y me entró la urgencia de meterme a su teléfono, específicamente a revisar si mantenía comunicación con sus exnovias y/o ex salientes. No encontré nada realmente preocupante (bueno, tampoco pude indagar a fondo), pero no solamente me siento super culpable, sino que creo que he desencadenado a un monstruo, ya que no dejo de pensar que si hubiese tenido más tiempo probablemente si hubiese encontrado algo. ¿Por qué estoy intentando sabotear mi relación?
“Entonces la mujer tomó el dedo del hombre mientras estaba en un profundo sueño y desbloqueó su teléfono”, leerás en uno de mis versículos favoritos el cual puedes encontrar en Apocalipsis Cap. 10, 3.
Antes que nada, revisar un teléfono ajeno no solo es un acto inexcusable e irrespetuoso, sino que es una decisión de alto riesgo, motivada por nuestras inseguridades y debilidades, que en cuestión de segundos pone en juego la confianza y respeto que hay entre ambas partes, y trae consigo un sentimiento de culpa y remordimiento que casi nunca valen la pena.
Pero quitando el componente moral, revisar el celular de tu galán es como andar en un campo minado: en cualquier momento pisas mal y explota algo. Y déjame decirte que son muy pocas las veces en las que uno ha hecho algo desde el impulso, ya sea de los celos o de la inseguridad, y dice: “¡qué buena idea que tuve!”. Por el contrario, hay dos de dos: o sale mal o sale mal o le encuentras algo, o él se da cuenta y tu quedas como una loca.
Como seguramente te pase a ti con tu propio celular, hay cosas y conversaciones que simplemente no son aptas para el público en general y en lo absoluto están relacionados a una infidelidad: ya sea con tus amigas quejándote algo de él, o tú diciéndole a tu mamá que no te cae tu suegra o screenshots del story que publicó un exgalán. Simplemente son parte de tu individualidad, así como igual le pasará a él, y eso no lo hace ni un ángel ni un demonio. ¡Ten cuenta que si te pones a rascar pues obvio que vas a encontrar algo que no te va a gustar!
La información que uno encuentra en un teléfono ajeno es tanto confusa, como relativa, y completamente sacada de contexto. En lugar de darte tranquilidad y respuestas, te va a hacer sospechar de cosas que probablemente ni siquiera sean ciertas. Así que no le des oportunidad a tu mente de hacer pecaminosa la inocencia.
Creo que la razón más obvia para revisar el teléfono de una pareja es la desconfianza, y no necesariamente generada por tu actual galán, más sí tal vez de uno que otro tramposo que te hayas cruzado en el pasado, o hayas escuchado a través de un amigo cercano. No por nada se dice, la burra no era arisca, la hicieron los palos. Pero hay una diferencia grande entre ser cauteloso y ser celoso o sospechoso. Los justos no tienen porqué pagar por los pecadores.
Ahora, la pregunta clave es: ¿Por qué sientes la necesidad de sabotear tu relación? Puede haber varias explicaciones. En primer lugar, es posible que tus acciones sean impulsadas por un miedo profundo a ser lastimada o engañada en una relación. O inclusive, provenga de una baja autoestima. Tal vez, en algún nivel, no te sientes merecedora de una relación exitosa y fiel, podrías encontrar inconscientemente maneras de poner a prueba la relación o buscar pruebas de que no mereces la felicidad en el amor. Es crucial explorar estas razones internas, entender su racionalidad y abordarlas de manera constructiva ya que de no hacerlo, no importará cuántas veces tu novio te diga que te ama, seguirás sospechando lo contrario.
Finalmente ten en cuenta: una relación sin confianza, es como un auto sin motor, puedes tratar de empujarlo, pero no llegará muy lejos… (¡y es agotador!).
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