La diseñadora peruana de origen iraní destaca a nivel internacional a través de trabajo utilizando técnicas artesanales y materiales únicos en el mundo de la moda contemporánea
Por Araceli Olaechea Landa
A casi diez de la creación de su marca, Mozhdeh Matin revela que, a finales de este mes, presentará su nueva colección “Home”. En esta propuesta para el hogar, continuará incorporando materiales sostenibles y técnicas artesanales. Su visión única combinará textiles únicos con una paleta de colores cuidadosamente seleccionada, reflejando su pasión por el diseño y la riqueza cultural del Perú.
La pionera en el uso de la shiringa
Nacida en Cajamarca, Mozhdeh Matin ha construido su carrera a partir de una sólida conexión con las técnicas artesanales de comunidades indígenas peruanas, fusionando tradición con una estética moderna. Su trabajo ha sido reconocido ampliamente por el Latin American Fashion Award y la revista Vogue México, e incluso la supermodelo Bella Hadid fue fotografiada luciendo sus prendas.
A lo largo de su carrera, Mozhdeh ha explorado profundamente el concepto de identidad cultural a través de la moda. “Al principio, todo giraba en torno a cómo hacer moda contemporánea con telas artesanales. Mis primeras colecciones eran más crudas, pero con el tiempo las texturas y los colores han evolucionado. No obstante, siempre ha sido importante para mí que se perciba que los materiales están hechos a mano”, comentó en entrevista con la revista Cosas.
Esta evolución no solo se ha dado en los materiales y acabados, sino también en la imagen de la marca: “Antes, mi enfoque era más juvenil. Ahora, busco diseñar para una mujer más madura y consciente de lo que usa”.
El material Amazónico que revoluciona la moda de lujo
Extraída de forma sostenible desde el siglo XIX, la shiringa es un biomaterial extraído del látex natural del árbol del mismo nombre, ubicado en la selva amazónica peruana. El proceso de recolección respeta el medio ambiente, protegiendo el ecosistema y proporcionando empleo a las comunidades locales. El látex se aplica cuidadosamente sobre algodón natural y se ahúma hasta lograr un secado total, creando un material elástico, impermeable y cálido.
Mozhdeh Matin es la pionera en el uso de la shiringa en la industria de la moda. La diseñadora trabaja directamente con ECOMUSA, una empresa comunal en Madre de Dios que gestiona 7,900 hectáreas de bosque. Este látex se transforma en un caucho natural que lo utiliza en la confección de prendas. Como descubrió la diseñadora, esta una alternativa ecológica al cuero animal. Ofrece la misma durabilidad y flexibilidad, pero con un impacto ambiental mucho menor.
“Todo empezó cuando una amiga me trajo un pedazo de caucho y me dijo: ‘Tienes que hacer algo con esto’. Lo guardé durante casi cinco años hasta que decidí experimentar con él. Contacté a una familia que trabajaba con shiringa y comenzamos a desarrollar el material juntos”, relató.
El resultado es una alternativa sostenible al cuero animal, con una huella ambiental significativamente menor. Esta técnica preserva las tradiciones artesanales locales y genera oportunidades económicas para las comunidades amazónicas involucradas.
Bella Hadid deslumbra en Milán con un conjunto de Mozhdeh Matin
El impacto de la innovación fue tal que Bella Hadid lució un conjunto de saco y pantalón de shiringa en la Semana de la Moda de Milán 2020. Esta elección despertó el interés internacional por la riqueza de los materiales peruanos y posicionó a Mozh como una diseñadora capaz de llevar la diversidad cultural y natural del Perú a los eventos más importantes del mundo de la moda.
Tuve el honor de probarme ese mismo saco y quedé maravillada no solo por su diseño impecable y la elegancia de su silueta, sino también por el color perfecto: un marrón con reflejos ámbar que brillaban sutilmente a la luz. La textura de la shiringa tiene una sensación única al tacto, suave, pero con una firmeza que transmite su durabilidad.
Era casi como si la prenda tuviera una energía propia. En ese momento comprendí realmente el nivel de innovación y autenticidad que Mozhdeh Matin aporta a cada una de sus piezas, gracias a su constante exploración de materiales, muchos de ellos provenientes de la riqueza natural del Perú.
El equilibrio entre las expectativas del mercado y la identidad de su marca
“Trato de no depender de las expectativas del mercado. Para mí, lo más importante es seguir mi intuición y respetar los tiempos de los procesos artesanales”, comenta Mozhdeh cuando se le pregunta cómo equilibra la preservación de las tradiciones ancestrales con las demandas de la moda contemporánea. En un mundo donde todo avanza a gran velocidad, se espera que los diseñadores y las tendencias se adapten constantemente a las exigencias del consumidor. Sin embargo, eso a menudo resulta en prendas de corta vida útil y que carecen de una identidad propia.
Cada prenda, al ser hecha a mano por artesanas, es única. Aunque el diseño pueda repetirse, los detalles que provienen de la mano que la confecciona siempre aportan algo diferente y especial, haciendo que cada pieza tenga una historia y esencia propia.
La diseñadora enfatiza que su objetivo ha sido siempre mantener la autenticidad en sus colecciones, sin caer en las tendencias que dicta la industria. “Mi reto desde el principio ha sido cómo hacer moda contemporánea con telas artesanales hechas aquí. No quería comprar telas; quería crearlas desde cero y que fueran producidas en Perú”.
Producción artesanal en tiempos de fast fashion
Para Mozhdeh Matin, la moda juega un rol crucial en el debate sobre la globalización y la preservación cultural. “Hace unos años, me di cuenta de que muchas de las técnicas que utilizo estaban en riesgo de desaparecer porque las nuevas generaciones no las estaban aprendiendo. Mi reto fue modernizar estas técnicas para que fueran relevantes y atractivas a nivel global”, manifestó.
El mito del diseñador “sostenible”
En una industria donde el término “diseñador sostenible” sobra, quise que Mozh compartiera que sentía cuando escuchaba que su marca era considerada como tal. La diseñadora se mostró escéptica ante el término “moda sostenible”, argumentando que es más un título de moda que una realidad tangible para muchas marcas. “Cuando comencé, ese concepto ni siquiera existía. Siempre he trabajado con artesanos y técnicas que promueven la sostenibilidad de manera natural, sin necesidad de etiquetar mi marca como tal”, explica.
A pesar de los desafíos de la producción artesanal en un mundo que prioriza la rapidez y el bajo coste, Mozh ha construido una relación cercana con los talleres con los que trabaja. “Nos tomamos nuestro tiempo para hacer las cosas bien. Si nos retrasamos una o dos semanas, es porque estamos asegurando la calidad. La gente que compra nuestras piezas entiende cómo trabajamos.”
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