Keya Morgan ha sido acusado de intentar manipular el patrimonio del creador de los superhéroes de Marvel, quien murió en noviembre del año pasado.

El exgerente de negocios de Stan Lee fue detenido el último sábado acusado de abuso de adultos mayores, fraude, robo y malversación, entre otros delitos. Desde principios del mes, Morgan tenía una orden de arresto en su contra, emitido por los fiscales de Los Angeles; no obstante, no ha sido hasta el último fin de semana que fue capturado en Arizona.

Stan Lee, ícono de la cultura popular por crear algunos de los héroes más famosos de cómics como Spider-Man y Black Panther, falleció en noviembre pasado a los 95 años, tras sufrir varias enfermedades en los últimos tiempos. La investigación sobre posibles abusos sufridos por el productor iniciaron en marzo de 2018.

Stan Lee

En aquel momento, el exabogado de Lee, Tom Lallas, solicitó una orden judicial contral Keya Morgan, aduciendo que el hombre de 43 años era «ingresó a la vida de Lee como su cuidador» y lo terminó aislando de sus seres queridos.

Lallas acusó a Morgan de explotar a Lee, quien mostraba signos de pérdida de memoria a corto plazo y juicio deficiente. Además de intentar adueñarse de la fortuna del magnate de los cómics, estimada en más de US$ 50 millones. 

Las acusaciones

A mediados de este mes, el exagente de Lee escribía en Twitter: «Sé lo molesto, hiriente y perjudicial que es ser injustamente acusado de una mentira #FakeNews. Fui falsamente acusado por dos estafadores de «abusar» de mi mejor amigo y socio Stan Lee. Ahora que las mentiras se han desacreditado, estoy en el proceso de demandar a los estafadores».

Además de la orden de alejamiento, la policía de Los Ángeles detuvo a Morgan el año pasado por hacer llamadas falsas el número de emergencia 911, en las que afirmaba que la vida de Lee estaba en peligro. Según los agentes, realizó dichas llamadas en junio de 2018 para convencer a Lee de abandonar su residencia de Hollywood Hills e instalarse en un apartamento de Beverly Hills, donde habría quedado bajo el control absoluto de su exrepresentante.

Tras la orden de alejamiento, Morgan declaró al portal TMZ que había «cuidado muy bien de Stan Lee en los últimos años» y que las acusaciones contra él eran falsas.

Por otro lado, las investigaciones también acusan al exgerente de realizar sesiones de firmas de autógrafos que le supusieron una ganancia de más de US$ 260 mil, que nunca llegaron al bolsillo de Lee.