Tras una vida creando íconos con su lente, la mirada de Mario Testino ahora recorre el mundo registrando la espontánea belleza de lo único, la natural universalidad de lo individual. Y se reencuentra con COSAS para hablar de sus nuevos proyectos, más personales y artísticos.
Por Isabel Miró Quesada
Mario Testino siempre está un paso por delante de lo que nos podemos imaginar. La última vez que hablé con él fue para preguntarle si asistiría al Fashion Week de Milán. Me respondió con una tranquilidad exquisita: “No. Estoy haciendo los jardines de mi casa en Sicilia”. Esto me hizo recordar a la última vez que vi a Mario. En ese entonces aún no había pandemia y estábamos sentados en su museo, el MATE. Me mostró unas imágenes impresionantes (no lo cuentes me dijo, aún está en proceso). Pero creo que sí puedo contar que desde que Mario Testino hizo ‘Alta Moda’ conectó con un tipo de arte que era muy distinto al que lo volvió mundialmente famoso. Algo diferente a los retratos de la princesa Diana, a las celebridades y a las tantísimas campañas de publicidad (Burberry estaba muerto y él lo revivió famosamente). Yo tenía 19 años cuando el National Portrait Gallery de Londres le rindió un homenaje. Y ahora que tengo 41 debo decir que aún no he asistido a nada igual. No faltaba nadie: realeza, patrones del arte, intelectuales, periodistas, artistas, músicos. Trafalgar Square estaba encendido, iluminando el camino al museo atestado de billboards: MARIO TESTINO. Madonna, entonces aún con Guy Ritchie, esperaba detrás del ahora rey Carlos para saludarlo. Kate Moss, que tiró su saco al suelo para poder abrazarlo. Y fue la propia Kate Moss la primera invitada a la muestra que Mario Testino hizo en el Museo de Arte de Lima (MALI). A la fecha, la que más visitas e ingresos ha recibido en el MALI (más que triplicando la segunda en línea). Y sin embargo, es éste (y no ese) el mejor momento de Mario. El más artístico, el más peruano, el más personal.
“Esta exhibición se llama ‘East’ y es parte de un proyecto que vengo haciendo hace 5 años llamado «A beautiful World».
-Mario, tu última exposición en Londres fue de tatuajes y flores. De un tiempo a esta parte, tu trabajo se torna cada vez más artístico. ¿Qué buscas hoy?
-Esa exhibición se llamaba East y era parte del proyecto que vengo haciendo hace cinco años llamado A beautiful world. Para la parte realizada en Japón fui a fotografiar a la yakuza que se tatúa el cuerpo entero. Llegué a ellos por el artista tatuador Hiroshi III. Los tatuajes en el cuerpo entero son una obra de arte. A la vez fotografié flores al estilo de los biombos japoneses de la escuela rimpa que se desarrolló del siglo XVII al siglo XIV usando un fondo dorado. Desde que hice la serie ‘Alta Moda’ me di cuenta que después de 40 años en la moda era el momento para aplicar todo lo que había aprendido en algo con un poco más de relevancia en el mundo de hoy.
-‘Alta Moda’ fue un antes y un después para el país. Pero poco se sabe sobre su origen. Cuéntanos.
-‘Alta Moda’ comienza con mi hallazgo de la colección de trajes peruanos en la ciudad del Cusco, en la Asociación Filigranas Peruanas. Me entró un deseo incontrolable por documentar esta colección de trajes que define la historia del vestuario del Perú. Al entrar en la moda me pregunté siempre el porqué de mi interés hacia el traje. Y al descubrir esta colección todo comenzó a tener más sentido. Muchas veces no miramos lo que tenemos bajo los ojos en nuestro afán por descubrir algo nuevo. Creo que esta colección de trajes nos hace a los peruanos orgullosos de nuestra historia y nuestro legado. Después de presentar ‘Alta Moda’ en mi museo y ver la reacción de la gente decidí extender mi curiosidad al mundo y comenzar a definir las cosas que a mi parecer hacen el viaje y descubrir el mundo excitante y comencé a documentarlas. Qué difícil debe ser no ser peruano.
“Desde que hice la serie Alta Moda, me di cuenta de que después de 40 años en la moda, era el momento para aplicar en algo con más relevancia en el mundo de hoy”.
-¿Cómo te sientes al haber llevado a tu país a un nivel internacional?
-Cuando me mudé a Londres venir del Perú era exótico pero siempre era visto como el tercer mundo. Para mí no es así. Por más que no todo funcione en el Perú como me gustaría. Tenemos lo nuestro y nuestra historia que nos hace únicos y siempre he querido enseñarlo al mundo.
-Luego ha seguido tu libro sobre el caballo de paso y la exposición sobre las tapadas. Sigues explorando el Perú.
-Al querer enseñar el Perú al mundo visto desde mis ojos decidí entrar a fondo en la búsqueda de lo que nos define a nosotros como peruanos. Tenemos tanto que es un trabajo de por vida.
“Fotografié flores al estilo de los biombos japoneses de la Escuela Rinpa”.
–¿Estás atravesando un período en el que te interesa explorar distintas culturas, costumbres y estéticas del mundo? ¿Hacer un registro antropológico a través de tu mirada?
-Creo que es muy importante para alguien de mi edad (67), con los logros que la vida me ha permitido conseguir, el comenzar a dar de vuelta al mundo. La globalización, que por un lado es maravillosa ya que crea igualdad para todos en acceso a lo que ocurre en el mundo, por otro lado destruye la individualidad de cada país. Yo creo mucho en la individualidad, ya que sin ella no habría conseguido el lugar en el mundo de la moda que logré. Muchos viven imitando al prójimo. Y a mi siempre me gustó ser yo. No fue fácil, pero por lo menos es honesto. Y creo que es importante enseñarle al mundo que, debido a la globalización, lo que estamos dejando atrás en el afán de ser como los otros nos hace siempre estar atrás. Solo crecemos cuando apreciamos lo que tenemos y lo elevamos a su más alto nivel. Uno puede elevar lo suyo para lograr los mejores resultados. Yo trataba de ser como los ingleses, pero solo cuando decidí empujar lo mío es que pude ser apreciado, ya que era diferente, individual. Y siempre lo diferente puede ser lo que lidera eventualmente.
-¿Cuál quisieras que fuera tu legado?
-No creo mucho en el legado. Creo que cuando la fiesta termina, termina. Pero sí quisiera dejar lo que he aprendido como base para el que lo aprenda después. Por esto creé mi curso online, para pasar lo que considero importante en mi proceso creativo. Creo que mi legado es compartir lo que he aprendido.
-Entiendo que el MATE está pasando por un periodo de incertidumbre. ¿Hay algún plan trazado a futuro para el museo y la fundación? Recuerdo que invertiste mucho de tu capital personal para que la fundación se pueda enfocar sobre todo en la educación.
-Al ver que el turismo bajaba drásticamente debido a la pandemia, tuve que cerrarlo, ya que con el público local no era autosuficiente. Por ahora no tengo planes de abrirlo, ya que tengo muchos proyectos en camino que necesitan mi atención y un museo no solo necesita de dinero sino también de tiempo. Pero la vida sabe lo que hace y veremos por dónde aparece de nuevo. Yo tengo un compromiso con mi país, así que veamos qué se presenta
De la serie ‘A Beautiful World’: mujer de la tribu Mursi de Etiopía, etnia que conservan una antigua tradición de un ensanchamieto del labio inferior.
-Tengo entendido que se está haciendo un documental sobre tu vida. ¿Nos podrías adelantar algo de eso?
-No he escuchado nada de esto ni lo estoy haciendo yo. ¿Quizás son solo rumores?
-¿Cuál de tus cualidades crees que te ha facilitado la conexión que querías lograr con los personajes que fotografías?
-Me gusta la gente. Soy curioso y abierto. La tolerancia es mi palabra favorita, ya que veo que muchos de nuestros problemas vienen de la intolerancia al prójimo, los celos y el no llegar a entender bien el propósito del otro. Al estar abierto dejas que todo fluya y vaya adelante.
“En Japón fotografié a la yakuza que se tatúa el cuerpo entero. Es una obra de arte”.
-¿De los tantos personajes que has fotografiado, cuál es el que más te ha impactado?
La princesa Diana.
-Yo recuerdo una portada muy especial que te hicimos junto a tu mamá. Tuve el placer de conocerla y recuerdo que era tremendamente especial para ti. ¿Cómo influye en tu vida?
-Ella luchó para que yo sea aceptado como soy. Sé que no era igual al resto y las diferencias siempre son criticadas y rechazadas. Ella me dio la confianza de ser yo. Por más que eso significaba mudarme al extranjero. Ella fue siempre generosa en ese sentido, dejándome ir.
-Has vivido una vida rodeado de celebridades y celebraciones. Sin ir muy lejos, las galas de MATE, que se convirtieron en la cereza del calendario social peruano. Pero además gozas de las invitaciones más cotizadas del mundo. Sin embargo, existe la impresión de que cada vez te llama más un estilo de vida de “wellness”. ¿Cómo es tu día a día hoy?
-He visto tanto y he tenido la suerte de tener acceso a todo. Al final me doy cuenta de que solo con tus amigos cercanos basta. Por supuesto, de vez en cuando tengo que salir al mundo, pero me encanta también mi tranquilidad. ¿Será envejecer? Aunque como soy alguien que sigue el día a día, quién sabe cuándo haré la próxima activación. Ya ando planeando mis 70, jajaja.
Esta colección de trajes es una muestra del orgullo peruano por su propia historia.
-Quienes te conocen mejor aseguran que “estás en tu mejor momento”. ¿Cierto?
-La verdad es que me siento muy afortunado de poder embarcarme en algo nuevo y lograr que llegue al nivel que estoy acostumbrado. Pasé 40 años en la moda y ahora creo que es interesante hacer algo nuevo, diferente. Uno comienza a repetirse cuando hace lo mismo por mucho tiempo. Es una nueva oportunidad y un nuevo reto que estoy disfrutando muchísimo. Me encanta viajar y descubrir. Y lo hago ahora bajo mis propias decisiones, sin tener que rendirle cuenta a nadie. Antes trabajaba para muchas marcas y ahora trabajo para mí. Qué más puedo pedir.
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