Recientemente, el padre de Nicola Peltz demandó a los organizadores de la boda que fue celebrada hace menos de un año. Según una publicación de Nicola, solo tiene malos recuerdos de ese día.
Por Ginger Astete
Nicola Peltz estaría considerando repetir su boda con Brooklyn Beckham porque la primera fue una “auténtica pesadilla”. La noticia llega después de que su padre demandara a los organizadores de la boda, que fue celebrada en abril de 2022 y que costó alrededor de tres millones de euros. A pesar de ello, para Nicola la ceremonia fue “estresante de principio a fin”, según revela una fuente a la revista británica Closer.
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“Nicola no estaba nada contenta con la celebración, con los preparativos de los tres organizadores y ahora asocia su boda con discusiones, problemas y tensiones», revela la fuente. El asunto ha sido “una auténtica pesadilla” para Peltz, hasta el punto de que “no es capaz ni de mirar las fotos de la boda” porque «le producen malestar». De acuerdo con Closer, su esposo, Brooklyn Beckham, está convencido de que la primera boda tuvo “un impacto negativo en su relación”.
Es por ello que Nicola y Brooklyn han decidido celebrar una segunda boda con motivo de su primer aniversario en abril para poder disfrutar de «un día positivo y feliz tras el estrés que le causó la primera”. Lo más seguro es que la segunda ceremonia sea tan lujosa y cara como la primera. Sin embargo, resultará difícil encontrar a alguien dispuesto a encargarse del evento, ya que el padre de Nicola, el multimillonario Nelson Peltz, ha demandado a Nicole Braghin y Arianna Grijalba – las organizadoras de la primera boda – por no haber cumplido con sus expectativas.
Por otro lado, las organizadoras y el primer organizador Preston Bailey, quien renunció al cabo de un año, reclaman una indemnización por unos preparativos de los cuales nunca se les pagó nada. De acuerdo con la prensa británica, el expediente judicial está lleno de detalles que sacan a relucir el lado más «caprichoso» y «déspota» de Nicola Peltz.
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Asimismo, la prensa comenta que la actriz y modelo de 28 años estaba siempre demasiado ocupada para contestar al teléfono, había elaborado múltiples listas de invitados y nadie sabía cuál era la oficial, quería que las flores blancas fueran “más blancas”, entre otros requerimientos. Pero las cosas empeoraron cuando las dos organizadoras renunciaron y fueron sustituidas a última hora por un tercer organizador para luego acabar en los tribunales. De acuerdo con Closer, Nicola estaba estresada por las continuas excusas a las que debía recurrir para que la madre del también modelo de 23 años y ahora su esposo, Victoria Beckham, no se enterara de los problemas que había detrás de la organización del evento.
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