Thomas Markle, padre de Meghan Markle, confesó que le hubiera gustado asistir a la ceremonia del último sábado.
Aunque la principal interrogante entre los medios británicos es la identidad de los padrinos de bautizo de Archie Harrison, hijo de los duques de Sussex, que hasta el momento se mantiene en secreto, hoy los reflectores se han posado en Thomas Markle, padre de Meghan y uno de los grandes ausencias en la ceremonia de bautizo de su nieto.
La decepción de Thomas
Un día después de la ceremonia de bautizo, llevada a cabo en la capilla del Castillo de Windsor, Thomas Markle ha comparecido ante la prensa. El abuelo de Archie explicó que desde niño ha sido formado parte de la Iglesia Anglicana, razón por la que le hubiese gustado asistir el sábado al bautizo de Archie Mountbatten. “A los 12 años fui monaguillo de la iglesia de la Reina y un miembro confirmado a los 14. Archie es mi nuevo nieto, así que desde luego me hubiera gustado estar allí para desearle a Archie y a sus padres salud y felicidad”, declaró Markle, claramente decepcionado.
El padre de la duquesa de Sussex también estuvo ausente en la boda de su hija con el príncipe Harry, celebrada el año pasado. Resulta claro que la relación entre padre e hija está quebrada, sobre todo después de que Thomas Markle atacara al príncipe Harry y a la familia real británica, e hiciera pública una carta en la que Meghan lamentaba su conducta.
Reconciliación negada
Sin embargo, tras el nacimiento de Archie, el padre de Meghan realizó declaraciones que podrían interpretarse como un intento de tender puentes con su hija y propiciar una reconciliación. “Estoy encantando de saber que tanto la madre como el niño están bien. Me enorgullece que mi nuevo nieto haya nacido dentro de la familia real británica y estoy seguro de que crecerá para servir tanto a la corona como al pueblo de Inglaterra con gracia, dignidad y honor”, dijo Thomas Markle, poco después del nacimiento de su nieto, en mayo pasado. “Que Dios bendiga a este niño al que le deseo mucha salud y felicidad. Mis felicitaciones para mi querida hija, la duquesa Meghan, y para el príncipe Harry. Que Dios salve a la Reina”, finalizó en aquella ocasión Markle.
A diferencia de él, Doria Ragland, madre de Meghan y separada de Thomas Markle cuando su hija tenía apenas dos años, sí estuvo presente en el bautizo de su nieto, e incluso que posó junto a Meghan y Archie en el retrato oficial de la ceremonia.