La familia real ha reaccionado con indiferencia y enfocándose en asistir a eventos de caridad. A continuación, explicamos el por qué.
Por Sergio Herrera
La semana pasada, durante una entrevista con el comediante estadounidense Stephen Colbert, el príncipe Harry afirmó que estaba seguro de que su familia y los medios británicos estaban apoyando una campaña activa para frenar la popularidad de su libro. «Después de 38 años, ellos han contado su versión de la historia. Este es el otro lado de la historia y hay muchas cosas ahí que quizás hacen que la gente se sienta incómoda y asustada», dijo el duque de Sussex.
No obstante, el panorama es más complejo de lo que aparentan las declaraciones de Harry. En efecto, la prensa británica está publicando titulares que rebotan lo que dicen los comentaristas que se oponen a las afirmaciones del libro. Sin embargo, no hay evidencia de que exista un esfuerzo coordinado por parte de fuentes palaciegas no identificadas que estén trabajando con los medios para desacreditar los hechos de Spare.
El silencio como respuesta
El príncipe William y Kate Middleton saludan al público durante su visita al nuevo Hospital Universitario Royal Liverpool.
Asimismo, en las últimas semanas, la única respuesta oficial del Palacio de Buckingham ha sido el silencio. Mientras que los Windsor han tratado de evitar cualquier opinión sobre las memorias del hijo menor de Charles III y Lady Di. Al punto que su hermano, el príncipe William, ignoró completamente a un reportero que le insistió por una opinión suya cuando salía de un evento de caridad. Y es que, en lo que va de enero, la familia real ha continuado sin parar su agenda de paseos y reuniones protocolares.
Por ejemplo, el rey Charles III, así como el príncipe y la princesa de Gales, comenzaron a aparecer en público solo dos días después de la publicación de Spare. Al monarca británico se le vio tan relajado que incluso se rio a carcajadas con una comunidad rural durante un encuentro en Escocia que tenía como objetivo combatir la soledad en zonas campestres. Aunque días después, ni el rey ni el príncipe William viajaron a Grecia para asistir al funeral del exrey Constantino. Fue un gesto que algunos interpretaron como una señal de que buscaban evitar mayor exposición mediática con la popularidad del libro de Harry como telón de fondo.
¿Por qué la familia real ha reaccionado con «indiferencia» al libro de Harry?
Spare, el libro de memorias del príncipe Harry, vendió más de 1,4 millones de copias en su primer día de publicación.
Los Windsor han evitado un show mediático hasta el momento. En su lugar, se han enfocado en recuperar la confianza en el público que podría haberse visto dañada por las revelaciones de Spare. Por su parte, actualmente, el título ha batido récords de ventas, al punto que estamos ante el libro de memorias más vendido de la historia en su primera semana de publicación.
Resulta irónico que la respuesta al comportamiento de la familia real esté incluida en el libro de Harry. Según el príncipe, la realeza conoce «el poder de la plataforma». Ellos saben que saludar en persona al público en los eventos y apoyar a las empresas locales les brinda apoyo popular. En otras palabras, a través de sus actos de caridad, se muestran cercanos a su pueblo, minimizando así las críticas vertidas en Spare.
Este discurso cobra mayor relevancia en la actualidad, pues el Reino Unido afronta una notable crisis económica que ha llevado a la mayor inflación en 40 años. Con este panorama, cobra mayor sentido que el rey Charles haya decidido destinar algunas de las ganancias del Crown Estate para el «bien público más general», en lugar de reforzar el tesoro real. El Estate es una colección de tierras e inmuebles que son propiedades personales del monarca británico.
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