Embárquese en una aventura glacial: crucero de lujo por la Antártida, pingüinos y ballenas incluidos. Las puertas del continente más enigmático están abiertas para una experiencia inolvidable.
Por Sebastián Arrieta
Hasta hace poco, la Antártida era un lugar desconocido para el turismo. Hoy, sin embargo, disfrutar de un viaje al continente más austral es posible gracias a los cruceros que cubren esta fascinante ruta. Acompáñenos en un crucero antártico y explore el Polo Sur con todas las comodidades de una experiencia boutique.
Durante el verano del hemisferio sur, diversas líneas de cruceros ofrecen al pasajero la oportunidad de contemplar los paisajes antárticos y sus espectáculos, como las colonias de pingüinos o el avistamiento de ballenas. Una de ellas es la prestigiosa naviera Azamara, cuyo representante comercial en el Perú es la empresa Savali, que dirige Joanna Sasieta.
La travesía del viaje antártico está concebida como un viaje de inmersión que permitirá a todos los pasajeros gozar de una experiencia única e inolvidable.
Azamara propone al viajero un periodo largo en cada puerto, brindándole así la posibilidad de disfrutar de las excursiones sin prisas ni horarios apretados. Los días en altamar que separan cada uno de los destinos del itinerario ofrecen al pasajero la ocasión propicia para disfrutar de las comodidades a bordo de un crucero boutique. Estas incluyen una variada oferta de restaurantes, una relajante sesión en el spa, las surtidas tiendas a bordo y los distintos espectáculos en el cabaret lounge o en el living room.
En esta ocasión nombraremos los cuatro puntos del itinerario antártico más destacados. Debe advertirse que todos los destinos y las actividades programadas dependen de las condiciones meteorológicas, al tratarse de uno de los recorridos más demandantes.
Antártida
La llegada a la Antártida se produce al rayar el día. Las diversas especies naturales y los espléndidos paisajes ofrecen al viajero una vista inmejorable. Usualmente, los cruceros permiten una larga estancia, de aproximadamente doce horas, para que el pasajero disfrute al máximo de su estadía. Las excursiones permiten al pasajero descender al continente antártico y caminar entre los miles de pingüinos que se congregan a las orillas. Ver a estos juguetones habitantes de la Antártida deslizarse entre los glaciares y andar sobre el hielo es, sin duda, una experiencia única en la vida. Además, la belleza de los glaciales, la inmensidad de las planicies antárticas solamente interrumpidas por montañas, cautivan a cualquiera.
Desde la cubierta, la temporada hace posible el avistamiento de ballenas. Durante la travesía, el crucero pasará cerca de la Isla San Jorge, lugar en el que se ubica la estación científica peruana Machu Picchu –nuestro segundo Machu Picchu–, un recordatorio de la presencia peruana en estos gélidos y misteriosos parajes.
A medida que la embarcación cruza el Mar de Hoces, en el horizonte se confunden el cielo y el océano. Las vistas nocturnas son magníficas, con un cielo poblado de estrellas y la compañía silenciosa del mar. A continuación, nombramos tres puntos del itinerario del crucero antártico.
Port Stanley
La capital de las islas Malvinas ofrece al pasajero un adelanto del clima antártico. El recorrido por esta ciudad ofrece la peculiar arquitectura británica de esta apacible isla. No dude en disfrutar de un smoko –término propio de los habitantes de las Malvinas, los “kelpers”, que designa un refrigerio– en uno de los tradicionales y hospitalarios bed and breakfast de la isla.
Durante el verano, miles de pingüinos acuden a las Falkland Islands para empollar los huevos de sus crías, por lo que la ocasión es perfecta para ver a cuatro de sus especies, entre las que se encuentra el pingüino emperador y el gentoo. Los amantes de la naturaleza podrán andar entre estas aves en York Bay y Gipsy Cove, ambas a pocos kilómetros de Port Stanley.
Ushuaia
Sin duda alguna, uno de los destinos más bellos, por sus impresionantes paisajes. El crucero atraca en la bahía de Ushuaia. Se aconseja tomar una excursión en catamarán, que le permitirá contemplar las colonias de pingüinos, lobos marinos y el icónico faro Les Éclaireurs o “faro del fin del mundo”.
Puerto Madryn
Ofrece la colonia de pingüinos de Magallanes más grande de América continental, en Punta Tombo. Los viajeros podrán caminar entre los pingüinos y contemplarlos en su hábitat natural.
Suscríbase ahora para obtener 12 ediciones de Cosas y Casas por solo 185 soles. Además de envío a domicilio gratuito y acceso instantáneo gratuito a las ediciones digitales.