El Dr. Erick Piskulich es uno de los más destacados cirujanos bariatras en el país. Para estar en el lugar donde está, su madre, Gina Negrillo, fue el motor que lo impulsó a tomar sus propias decisiones y a seguir sus sueños hasta alcanzarlos. En una conversación con COSAS, el dr. Piskulich y su madre nos muestran un lado más personal de la relación entre madre e hijo, su complicidad y cómo el reconocido médico logró operar a su madre para mejorar su estado de salud.

Por Redacción COSAS

Desde muy pequeño, el Dr. Piskulich ha admirado las historias de su superhéroe favorito: Superman. Con una sonrisa en el rostro, Erick recuerda que una vez le dijo a su padre que quería ser el “Hombre de acero”, a lo que su papá le respondió: “No es posible que seas Superman, pero sí puedes ser médico. Superman y los médicos son lo mismo. Tú sabes que Superman salva vidas; bueno, los médicos salvan vidas; tú sabes que Superman puede ver a través de las paredes con su visión de rayos X; bueno, los médicos también pueden hacer lo mismo, pueden ver a las personas con rayos X. Me decías que Superman se va a la punta de la Tierra a escuchar todos los problemas que ocurren con su superaudición. Los médicos tienen un aparato que se llama estetoscopio que ayuda a escuchar por dentro a las personas”, y así me llamó la atención.

Es así que desde pequeño el Dr. Piskulich fue cultivando la vocación que practica al día de hoy y que su mamá siempre motivó y apoyó, así como en cualquier actividad que deseaba realizar Erick, como la música, por ejemplo.

Erick Piskulich

Dr. Erick Piskulich: “Mucha gente dice que la carrera es muy sacrificada para los alumnos de Medicina, pero la madre del médico y el padre del médico son los que más sacrificio hacen”.

Lo mismo pasó cuando el especialista le dijo a su madre Gina que quería ser médico. Ella siempre fue su pilar más importante. “Mucha gente dice que la carrera es muy sacrificada para los alumnos de Medicina, pero la madre del médico y el padre del médico son los que más sacrificio hacen. No solo por ser una carrera larga, sino porque hay días que no vamos a la casa porque estamos en las guardias en los hospitales, nos quedamos sin ropa, nos quedamos a veces sin comida, y las madres siempre están pendientes. Ellas te preguntan: “Hijo, ¿ya almorzaste?”, y uno responde que todavía no, que ya almorzaré que no se preocupe, y de la nada se aparece tu madre con un plato. A toda madre que tenga un hijo o una hija que estudia Medicina se le hace un monumento”, comenta el doctor.

El doctor Erick Piskulich se formó en la universidad San Martín de Porres como médico general. Trabajó con el pionero de la medicina bariátrica en el país, el Dr. Gustavo Salinas Sedó. Realizó una especialidad de Cirugía Digestiva en el Hospital Militar Central, por la Universidad de San Marcos. Es ahí donde se empieza a formar en el Hospital Militar conjuntamente con la Clínica Avendaño con cirugía bariátrica. Luego siguió formaciones en Brasil y Estados Unidos. Luego de eso, se convirtió en el primer “fellow”, el primer subespecialista formado en la Clínica Avendaño, en el programa de subespecialidad bariátrica, como médico titular en la prestigiosa clínica.

“Mi mamá siempre se ha dedicado a mí. Mi mamá siempre ha dado todo por mí. Me acompaña desde chiquito, desde mis primeros pininos, toda mi carrera, siempre ha estado ahí”.

El cambio de Gina

La orgullosa madre cuenta con entusiasmo que su hijo le realizó una manga gástrica que le cambió la vida. En un momento llegó a pesar 105 kilos, lo que le causó varios problemas de salud, como hipertensión, prediabetes, hígado graso, dolor en las rodillas, incluso, le era imposible amarrarse las zapatillas. Ante esta situación, Gina optó por tratamientos nutricionales, farmacológicos y ejercicios; sin embargo, no alcanzaba los objetivos deseados.

Un día, la madre de Erick se encontraba triste. Gina le dijo: “Erick, no sé cómo remitir esto, necesito ayuda”. Entonces, él me dijo: “Yo te voy a operar”.

A pesar de que en ese momento el médico titular para operar a la madre de Erick era el Dr. Salinas, Piskulich terminó realizando la exitosa operación bajo la supervisión de su mentor. Ese fue el último paso para que el Dr. Erick se graduara como bariatra en la Clínica Avendaño.

Gina, con entusiasmo, dice que tras la operación desapareció su prediabetes, ya logra controlar su presión y dijo adiós al hígado graso; es más, el temor que tenía antes por ir a la playa ha desaparecido. Ahora tiene una excelente salud, y su autoestima está más fuerte que nunca, todo gracias al procedimiento que le hizo, como ella dice, “el amor de su vida”, su hijo, y que le cambió la vida.

Gina Negrillo mejoró su salud luego de someterse a una operación de manga gástrica, la cual realizó su propio hijo, el Dr. Piskulich.

¿Qué es la manga gástrica?

Como explica el Dr. Erick Piskulich la manga gástrica es una de las cirugías más realizadas a nivel mundial. “De todas las cirugías bariátricas que existen, es la cirugía más rápida de hacer y una de las mejor toleradas por los pacientes, y va muy bien con grados de obesidad leves, con enfermedades metabólicas no muy severas. Es una cirugía que consiste en cortar el estómago en una manera vertical, cómo si fuese un plátano. Se llama manga porque porque termina pareciendo una manga de camisa, pero es más similar a un plátano. Entonces, se retira una porción del estómago en donde se presenta una hormona que está ligada a la saciedad de las personas, que cuando se quita, los pacientes se sacian muy fácilmente y aumenta el vaciamiento del estómago al intestino, activando unos receptores importantes de insulina y glucosa en el cuerpo. Es una cirugía que salva vidas, y en Clínica Avendaño tenemos la mejor carta de presentación a nivel profesional”.

El Dr. Piskulich agrega: “Es importante que la gente entienda que la cirugía no es una cirugía para bajar de peso, como usualmente la interpreta la gente. Es una suerte abocada para remitir enfermedades metabólicas por el exceso de peso; no son para verse flaco, no son cirugías estéticas. Cuando los pacientes remiten su porcentaje de grasa corporal, hacen que las enfermedades se vayan o no se agraven con el tiempo”.

Erick Piskulich

El Dr. Piskulich es médico titular de la Clínica Avendaño.

Precisamente, la manga gástrica fue la cirugía que mejoró enormemente la salud de Gina, quien, gracias a las manos de su hijo, ha cumplido con el objetivo de mejorar su salud, sentirse bien y reducir posibles causas de enfermedades derivadas de la obesidad.

Finalmente, el doctor sentado en su consultorio al lado de su mamá explica lo que significa ella en su vida: “Todo lo que hay alrededor de Erick Piskulich es mi madre. Mi mamá siempre se ha dedicado a mí. Mi mamá siempre ha dado todo por mí. Me acompaña desde chiquito, desde mis primeros pininos, toda mi carrera, siempre ha estado ahí, en la parte emocional y en la parte personal. Cuando he hecho mis travesuras de vida, porque todo el mundo tiene equivocaciones, sin juzgarme, mi mamá siempre me ha apoyado y siempre me ha sacado adelante”.

 

View this post on Instagram

 

A post shared by Dr. Erick Piskulich (@dr.piskulich)

Dr. Erick Piskulich Negrillo
Cirugía Digestiva & Laparoscópica
Cirugía Bariátrica (Metabólica y Obesidad)
Cirugía del Sudor
Endoscopía Quirúrgica / Ecografía
Staff Cirujanos, Clínica Avendaño
Página web: www.drpiskulich.com
Dirección: Calle Leonidas Avendaño 116, Miraflores – Lima – Perú
Teléfono para reserva de citas: +51 (01) T (0051) 446-1694  WhatsApp 984 750 637

Suscríbase ahora para obtener 12 ediciones de Cosas y Casas por solo 185 soles. Además de envío a domicilio gratuito y acceso instantáneo gratuito a las ediciones digitales.