Un nuevo libro basado en testimonios del personal del palacio expone las dinámicas privadas de la realeza, incluidos apodos secretos y tensiones internas.
Por Redacción COSAS
Las revelaciones sobre la familia real británica vuelven a sacudir el Palacio de Buckingham. Según el libro Yes Ma’am: The Secret Life of Royal Servants (Sí, señora: la vida secreta de los sirvientes reales, en español), basado en testimonios del personal de servicio, Kate Middleton trata al príncipe William «como a su cuarto hijo» debido a sus cambios de humor. La obra, escrita por Tom Quinn y adelantada por The Times, también expone los apodos despectivos que William y Harry usaban para referirse a la reina Camilla, así como las tensiones generacionales dentro del palacio.
El libro revela rutinas de baño, el desagrado del príncipe Andrés por el lunar facial de un cortesano y el esnobismo oculto en Buckingham.
Fuentes dentro del Palacio describen al Príncipe de Gales como alguien propenso a cambios de humor cuando sus rutinas se ven alteradas, un rasgo que compartiría con su padre, el Rey Carlos III. Una ex empleada del servicio real afirmó: «Kate es su equilibrio. Cuando William se irrita, ella lo calma, aunque a veces dice que es como tener un cuarto hijo». Según los testimonios, los miembros de la realeza, acostumbrados a una vida de privilegios y protocolos rígidos, pueden reaccionar de manera desproporcionada ante cualquier cambio inesperado.
Los apodos secretos para la reina Camilla
Camilla fue presentada gradualmente a William y Harry. William la conoció en 1998, pero casi no aparecieron juntos en público antes de su boda con Carlos en 2005.
Uno de los aspectos más controversiales del libro es la revelación de los apodos que los príncipes William y Harry usaban para referirse a su madrastra, Camilla Parker Bowles, antes de que se convirtiera en reina consorte. De acuerdo con las fuentes, los hermanos la llamaban «Lady Macbeth», en referencia al personaje de Shakespeare conocido por su ambición, así como «Bruja del Oeste» y «Cruella de Vil». Estos sobrenombres reflejan la tensa relación familiar en los primeros años tras la muerte de la princesa Diana y la resistencia de los príncipes a aceptar a Camilla en la familia.
Meghan Markle y el choque cultural en la realeza
Meghan Markle contó a Oprah (2021) que se sintió aislada y sin apoyo en la realeza, enfrentando problemas de salud mental y acoso público.
El libro también aborda el impacto de Meghan Markle en la familia real, destacando el choque entre su estilo afectuoso y el protocolo británico. Su costumbre de abrazar y saludar con besos en la mejilla generó incomodidad tanto en la familia como en el personal, quienes lo consideraron inapropiado. Según una fuente anónima, algunos malinterpretaron estos gestos como intentos de coquetear con el Príncipe William, lo que habría profundizado la brecha entre los hermanos.
División dentro del palacio
Quinn señala que existe una clara división generacional entre el personal de palacio respecto a la modernización de la monarquía. Mientras los empleados jóvenes ven con buenos ojos los cambios impulsados por figuras como Meghan, los más veteranos defienden las tradiciones con firmeza. Según testimonios, la duquesa de Sussex fue apodada «Meg la Mística» por su interés en temas espirituales y su enfoque progresista, lo que habría generado resistencia entre los círculos más conservadores de la realeza.
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