La FIFA no es ajena a la guerra en Ucrania e impone fuertes sanciones deportivas a la selección de fútbol rusa, así como a los equipos de fútbol que pertenecen a ese país.

Por Walter Chunga

La indignación que generó la invasión rusa a suelo ucraniano causó repercusión no solo a nivel político, económico y social, sino también en el ámbito deportivo. La FIFA, la UEFA y la Euroliga decidieron expulsar al seleccionado y a los clubes rusos de toda competencia que organizan. Esto se da, solo un día después de que se anunciara de que no se podrían disputar encuentros internacionales en Rusia y de que esta no podría utilizar su nombre, bandera e himno.

Sin embargo, la FIFA decidió al igual que la UEFA, echar de todas sus competencias a los equipos rusos. Al parecer, la indignación de la comunidad internacional hizo que la FIFA actúe en consecuencia para finalmente tomar la decisión ya conocida.

Rusia excluida de toda competencia deportiva organizada por la FIFA y la UEFA.

El efecto de la sanción de la FIFA será inmediato. De esa manera, Rusia queda eliminada de la repesca que iba a jugar contra Polonia en su partido de ida el 24 de marzo en Moscú y posteriormente el 28, con el objetivo de lograr un cupo en Qatar 2022.

Las federaciones europeas rechazan jugar con Rusia

El día viernes, recién iniciada la invasión rusa en Ucrania, las Federaciones de Fútbol de Polonia, la República Checa y Suecia transmitieron a la FIFA por carta su negativa a jugar en Moscú. Veinticuatro horas más tarde la federación polaca afirmó que no aceptaría jugar con Rusia así fuera en una cancha neutral o bajo cualquier otro nombre. A este pedido se sumaron las federaciones de Inglaterra, Francia, Gales y Dinamarca, los cuales ejercieron una fuerte presión sobre la FIFA para endurecer su postura contra Rusia.

Por el lado de la UEFA, el Spartak de Moscú fue echado de la Europa League. Este equipo ruso se encontraba por disputar octavos de final contra el equipo alemán Leipzig. En ese sentido, otra importante decisión de la UEFA fue la resolución de patrocinio con el gigante gasístico ruso “Gazprom”, que le reportaba una ganancia de más de 45 millones de euros al año.

La Euroliga de baloncesto también se subió a la ola de sanciones a Rusia y suspendió la participación en la competición que lleva su nombre a los clubes rusos (CSKA de Moscú, Unics Kazán y Zenit de San Petersburgo) así como al que disputa la Eurocup (Lokomotiv Kuban Krasnodar). El deporte también se suma a la presión internacional contra el país de Vladimir Putin.

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