Shane Black
Antes de convertirse en director, Black forjó una carrera de casi 20 años como guionista en películas como Arma Mortal 1 y 2 y como actor en papeles secundarios en cintas como Predator y RoboCop 3. Fue recién en 2005 cuando se encargó de dirigir. Su debut se dio con Kiss Kiss Bang Bang, cuyo guion también escribió. La película era una ingeniosa mezcla entre cine negro y comedia negra. Muchos le adjudican a este film la resurrección cinematográfica de Robert Downey Jr., quien fue uno de los protagonistas junto a Val Kilmer. Tuvieron que pasar 8 años más para que vuelva a dirigir, esta vez con Iron Man 3, donde volvió a tener a Downey Jr. a sus órdenes.
El año que acaba de pasar dejó de lado los blockbusters y escribió y dirigió una de las películas más menospreciadas de 2016. The Nice Guys, con Ryan Gosling y Russell Crowe, siguió la línea de su primera película (también fue un mix de cine negro y comedia negra), pero con una personalidad propia y un ritmo distinto. Tras esto volverá a las grandes producciones, pues sus siguientes proyectos son la nueva película de Predator y la adaptación de The Destroyer.
Neill Blomkamp
Aunque sus últimos trabajos –Elysium (2013) y Chappie (2015)– fueron bastante cuestionados, este director nacido en Sudáfrica merece ser visto. Su opera prima es una muestra de su particular mirada y su potencial cinematográfico. Con District 9 (que escribió junto a su esposa, la guionista Terri Tatchell), Blomkamp supo conjugar temas sociales y filosóficos a una trama en la que no faltaron escenas de acción, persecuciones y armas alucinantes. Todo lo que se puede esperar al hablar de una película de alienígenas.
Su siguiente trabajo será una nueva entrega de la saga de Alien aún sin nombre oficial. Este filme tiene el aval del propio Ridley Scott, que además trabajará como productor del proyecto.
David Robert Mitchell
No ha dirigido hasta ahora ninguna película con escenas de acción propiamente dicha, pero al parecer lo hará pronto. ¿Entonces por qué está en esta lista? Porque su próximo proyecto será una película que combina el thriller y el cine negro. Para Under the Silver Lake contará con las actuaciones de Andrew Garfield, Riley Keough y Topher Grace.
¿Y por qué entusiasma tanto este nuevo trabajo? Porque sus anteriores cintas han sido aplaudidas por la crítica y no hay entre ellas muchos parecidos. La película con la que debutó, The Myth of American Sleepover (2010), es un drama de aprendizaje y crecimiento aplaudido por la crítica que poco tiene que ver con It Follows (2014), un filme de terror que se estrenó en Cannes y que recibió casi solo buenos comentarios. Si algo va a hacer este cineasta de 43 años, tenemos que verlo.
Nicolas Winding Refn
Talentoso. Raro. Polémico. Esas son tres palabras que podrían definir a este director nacido en Dinamarca. Y aunque tampoco es alguien dedicado netamente a las películas de acción, su filmografía posee películas en las que la sangre y los combates cuerpo a cuerpo son componentes importantes de la trama. En la trilogía Pusher, por ejemplo, se adentra en el violento mundo criminal que rodea el mercado de las drogas en una narrativa que produce tanta tensión como adrenalina. (Punto extra: la primera de estas películas marcó no solo su debut como director sino también el inicio de la carrera actoral del excelente Mads Mikkelsen).
Otras películas en los que la violencia tiene un papel importante son Valhalla Rising (2009) y Drive (2011). En la primera de ellas Mikkelsen se convierte en un silencioso y letal asesino que terminará embarcado en una travesía que llevará a un grupo de vikingos hacia suelo americano. En la otra Ryan Gosling interpreta a un conductor tan hábil como callado… y también letal. En ambos filmes los protagonistas tienen la chance de demostrar su habilidad para pelear y podemos presenciar algunas muertes tan sangrientas como impresionantes. Winding Refn puede dividir a los críticos, pero no mantiene indiferente a nadie.
Por Omar Mejía Yóplac