Ha sido portada de “Playboy” México. Viaja por el mundo a destinos envidiables y tiene una comunidad de más de 360 mil seguidores en Instagram. Tiene los compromisos de una socialité y lleva una vida soñada en Miami, donde reside desde hace años. Ella es Alejandra de la Fuente, la hija de Laura Bozzo, de quien sabemos nada y mucho a la vez. Descubrámosla.
Por Gonzalo “Sayo” Hurtado
Muchas imágenes y momentos vienen a la mente si pensamos en Laura Bozzo y cuán visible era en los tramos finales del siglo XX. Se trata de una de las figuras mediáticas más controversiales y políticas de la televisión peruana, de ese momento e incluso hasta el día de hoy. Pero, en el caso de su hija Alejandra de la Fuente, solo los más memoriosos podrán ir más allá de las imágenes de su célebre madre para descubrirla.
En aquellos años convulsos de los noventa, en que la conductora transitaba entre Panamericana Televisión y América TV, muchas veces la acompañaba una muchachita entre los 11 y 12 años, la misma que solía aparecer en sketches como la imitadora de Laura o bailando en algún musical para celebrar el cumpleaños de la ya popular estrella de televisión, bajo el paraguas de programas cómicos como “Risas y salsa” o su símil, “Risas de América”.
Conociendo al personaje
“Hice el colegio hasta sexto grado en Lima y de ahí nos vinimos a Miami. Mi mamá estaba trabajando en Telemundo y yo estaba todo el tiempo yendo y viniendo a Perú, pero ya estaba estudiando y viviendo acá, en Miami”. Es justamente desde esa ciudad en Florida –la única a la que llama su hogar– que Alejandra nos habla con seguridad, pero también con cierto tono nostálgico, como evocando una vida cada vez más lejana.
De aquella chica menuda que pasó toda su primaria en Lima, queda poco en comparación con la muchacha voluptuosa que se siente cómoda en su paraíso latino y que tiene un estilo de vida envidiable a juzgar por su actividad en Instagram en una cuenta que lleva por nombre (¿y por álter ego?) un coqueto Miss Ale (@ missale_xo).
Alejandra de la Fuente, portada de Playboy México en 2013.
¿Y cómo era esa chica que iba del colegio al backstage de algún canal de televisión? ¿Parecía mayor o tal vez se le veía agrandada? “Yo he aparentado mi edad siempre. He vivido bien mi niñez. Mejor, imposible”, responde Alejandra. “Me alegra que en ese momento no hubieran las redes sociales que hay ahora, porque yo pude aprovechar mi niñez al 100%”, agrega aliviada de no haber sido parte del cotilleo habitual que podía desatar cualquier emisión del programa de la famosa “Señorita Laura”.
Encuentra el artículo completo en la edición 685 de la revista COSAS, ya a la venta en tiendas, quioscos y ahora, también la puedes solicitar desde Rappi.