El actor británico Christian Bale, en una entrevista para la revista GQ, reveló que para ‘American Psycho’ le pagaban tan poco que los maquilladores se burlaban de él porque cobraba menos incluso que ellos. Además, el actor recordó que aceptó el papel para evitar que la casa que compartía con su padre y su hermana sea embargada.
Por Cecilia Navarrete
En la entrevista, Christian Bale comenta que rodó tres películas el año pasado, pero lleva meses sin ver un set de rodaje. Y eso le hace tremendamente feliz. «Podría estar sin trabajar toda la vida», aclara. La estrella de cine lleva 35 años haciendo películas, y ha obtenido cuatro nominaciones al Oscar y una estatua a Mejor actor secundario por ‘The Fighter’ (2011).
La película «American Psycho» fue un rotundo éxito, sin embargo, para Christian Bale, no necesariamente le abrió suficientes puertas en su carrera. Entre que le llevó muchísimo tiempo en realizarla, le «pagaron lo mínimo que estaban obligados a pagarle legalmente». «Recuerdo que una vez, sentado en el tráiler de maquillaje, los maquilladores se rieron de mí porque cobraba menos incluso que ellos. Después de la película, mi motivación era conseguir dinero suficiente para que no me embargaran la casa». Vivía con su padre y su hermana en una casa, y aceptó el rol para evitar que sea embargada. «Nadie excepto la directora me quería ahí. Me dijeron que sólo me darían el papel si aceptaba el dinero que querían pagarme».
Tenía 13 años cuando protagonizó ‘El imperio del sol’ de Steven Spielberg, un papel que aceptó porque su familia estaba necesitada. Pero no le gusta hablar de sí mismo. Dice que «cree que el hecho de que la gente lo conozca de verdad podría arruinar todo aquello que intenta conseguir como actor». Por ello, no concede muchas entrevistas.
Detrás de la barba que porta ahora, se puede ver la cara de su icónico rol de Batman.
Este año, estrena tres películas. En verano, lo vimos en ‘Thor: Love and Thunder’, más tarde regresa con ‘Amsterdam’, de David O. Russel, y a finales del año, estrena ‘The Pale Blue Eye’. “Es demasiado”, dice sobre el hecho de estrenar tres películas el mismo año: “Nadie lo necesita. Yo no lo necesito. Nadie necesita verme tanto”.
Bale vive hace mucho en Los Angeles, pero pasa de largo de la vida hollywoodense. “A mí no me va nada ese rollo. Vivo en L.A. porque mi mujer es de aquí. De lo contrario, probablemente viviría en otro sitio. Pero todo el mundo se imagina que la gente del cine se ve muy a menudo, que quedan para hablar de películas y tal. Sólo de pensarlo me dan ganas de darme cabezazos contra la mesa».
Además, Bale admite que sabe poco de cine, pero indica que no es necesario saber mucho para hacer lo que hace. El actor se encuentra eufórico de no estar rodando nada. «Me gusta hacer cosas que no tienen nada que ver con el cine. Y algo que me encanta es no tener que vestirme bien y esas cosas, no pretender ser alguien durante largos periodos de tiempo». No le gusta pretender no ser él mismo, recalca.
Puedes leer la entrevista completa con GQ en el siguiente enlace.
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