La cantante peruano-argentina Alexia Bosch acaba de lanzar su primer sencillo, Rebel Soul, que rápidamente se ha posicionado en las principales listas y rankings de Spotify. Con su voz como instrumento principal y casi ochenta mil seguidores en Instagram, Alexia es una estrella en ascenso.
Por Vania Dale Alvarado
En su cuenta de Instagram (@alexiaboschmusic), la artista cuelga videos de sus propias versiones de sus canciones favoritas.
No resulta extraño que, con solo dieciocho años, Alexia tenga claro que quiere dedicarse a la música de por vida, pues creció en un ambiente musical privilegiado: su abuela es la peruana Luchy González, reconocida pianista y directora de coro; su madre, María Luisa Harth-Bedoya, una destacada representante de la guitarra clásica en nuestro país, y su tío, el mundialmente aclamado Miguel Harth-Bedoya, director de orquesta ganador de premios Emmy y Grammy. “Mi mamá me tocaba la guitarra desde que estaba en la panza. Para mí, era normal estar rodeada de músicos y coristas que venían a casa para los ensayos. Ahora que estoy más grande, lo veo con otros ojos y me doy cuenta de la suerte que tuve de vivir esto desde tan chica”, reflexiona Alexia, quien toca guitarra desde muy niña, gracias a su mamá, y aprendió piano de manera autodidacta.
“Siempre supe que quería hacer algo con la música, tenía un plan elaborado”, cuenta. “Terminaría el colegio e intentaría meterme en algún programa de televisión del estilo de ‘American Idol’ y, si nada pasaba, estudiaría música en una universidad. Si después de eso no resultaba nada, me convertiría en profesora de canto”, recuerda entre risas. Al día de hoy, parece que la artista no tendrá que seguir ese último camino, pues se encuentra dedicada al cien por ciento a su carrera como cantante y compositora desde que IronHeart Records, la disquera a la que pertenece, puso sus ojos en ella.
Alexia ya alista el video promocional de “Rebel Soul”, mientras continúa trabajando junto al equipo creativo de IronHeart Records.
La historia de cómo la descubrieron, como bien dice, “parece de película”. “Siempre escribía canciones, pero no las finalizaba, y justo en 2015 terminé mis dos primeras canciones. Un mes después, me contactaron a través de Instagram los de IronHeart Records para decirme que les encantaba mi onda y preguntarme si escribía mis propias canciones”. Cuando Alexia se dio cuenta de que el fundador de la disquera era Barrett Yeretsian, quien compuso y produjo “Jar of Hearts”, una de las canciones que la atrajeron al canto y la primera que Alexia interpretó en público, su corazón adolescente terminó de explotar de emoción. “Yo no podía creerlo. Estaba en el momento y en el lugar correctos”, expresa emocionada. Todo parecía obra del destino.
Tras conocer vía Skype a Barrett y conversar semanalmente con él durante algunos meses, la invitó a ella y a su familia a conocerlo a él y a su equipo en Los Ángeles. “Viajamos en enero, nos conocimos y empezamos a hablar más a profundidad del proyecto, de qué es lo que yo quería comunicar a través de mi música, de lo que queríamos lograr a través de este nuevo camino que íbamos a empezar juntos… Pero el momento decisivo llegó cuando él se sentó en el piano y empezó a improvisar y yo improvisé melodías encima. Entonces nos miramos y supimos que queríamos ser compañeros de música”, relata.
La cantante posa junto a su tío, el reconocido director de orquesta Miguel Harth-Bedoya, tras una de las presentaciones de este en el anfiteatro Hollywood Bowl, en 2016.
Rebel Soul es el resultado de esta unión de fuerzas creativas entre Alexa y Barrett, y el primero de varios temas que la cantante ya tiene planeado lanzar el próximo año. “Ahora estamos enfocados en cómo reacciona la gente con ‘Rebel Soul’, que es un proceso que nos tomó dos años –porque yo vengo trabajando desde que tengo dieciséis–. Estamos muy contentos con el lanzamiento de la canción, pero yo ya quiero que salga la segunda, la tercera, ¡la cuarta! En todo este tiempo hemos escrito un montón de temas y seguimos escribiendo más. No importa qué estemos haciendo, siempre estamos escribiendo”.
Después de todas estas experiencias mágicas, tampoco es de extrañar que Alexia decidiera mudarse definitivamente a Los Ángeles para trabajar junto a un equipo de personas relacionadas al mundo musical –a quienes considera su familia–, en un entorno que pareciera rememorar su niñez, rodeada de músicos e instrumentos. Porque mientras esté haciendo música, Alexia siempre se sentirá como en casa.
