Este miércoles 3 de octubre, Meghan Markle y el príncipe Harry visitaron Sussex, ducado que da nombre al título nobiliario que la reina Isabel II les concedió al casarse.
Los duques de Sussex han realizado una de las visitas más emocionantes de su matrimonio con su llegada a Sussex, condado histórico ubicado en el sur de Inglaterra, que da nombre al título nobiliario que adquirieron al convertirse en marido y mujer.
Su llegada a Chichester, capital del condado de Sussex, fue de lo más emocionante: miles de personas los recibieron con aplausos y regalos en las calles de la ciudad.
«Los duques de Sussex se han mostrado emocionados y radiantes de felicidad durante los diferentes actos que han tenido a lo largo del día, pero si hay algo que ha destacado de la jornada de hoy han sido las constantes muestras de cariño que ambos se han dedicado», contó Hola sobre su llegada.
Meghan Markle y el príncipe Harry demostraron estar más enamorados que nunca y no dejaron de sonreír, sostenerse las manos e intercambiar miradas cómplices durante su visita.
«A lo largo de todo el día y durante los diferentes actos, el príncipe Harry se ha mostrado pendiente de Meghan, a la que ha cedido el paso en todo momento cuando esta se paraba a saludar a los ciudadanos que gritaban su nombre o el de su marido», añadió Hola.
Visita real
Los duques iniciaron su visita en Edes House. Según Hola, este edificio histórico «alberga una de las dos únicas copias manuscritas de la Declaración de Independencia de los Estados Unidos que hay en todo el mundo, conocida con el nombre de Declaración de Sussex».
Su segundo paso fue dirigirse a la ciudad de Bognor Regis para inaugurar el Parque de Tecnología Digital e Ingeniería de la Universidad de Chichester. Tras esa visita, llegaron a The Joff Youth Centre. Según Sussex Express, los duques llegaron a esta institución para conversar con jóvenes sobre temas relacionados a la salud mental.
Finalmente, la pareja cerró su tour por Sussex con una visita a Brighton, ciudad costera de Sussex. Allí conversaron con las mujeres del Survivors’ Network Knitwork Project,una comunidad que apoya a las víctimas de violencia sexual.