El esposo de Zara Tindall fue entrevistado y reveló detalles del bautizo que, excepcionalmente, compartieron dos miembros de la familia real: Lucas y August, su hijo y el de la princesa Eugenie

Por Arianna Gonzáles

Los bautizos son una de las ceremonias más importantes para la familia real. En la foto, el bautizo de Archie, el hijo del príncipe Harry y Meghan Markle.

La reciente entrevista de Mike Tindall, el esposo de Zara, la nieta de la reina Isabel, en el podcast The Good, The Bad and the Rugby sumergió a los oyentes en el bautizo de su hijo y el de la princesa Eugenie.

En una ocasión sin precedente, los royals celebraron un bautizo doble, como excusa perfecta para que la reina no se pierda de ninguno de los dos eventos debido a sus problemas de salud.

“Fue un día encantador. Lucas incluso disfrutó de que le vertieran sobre la cabeza agua bendita del río Jordán”, confesó Tindall.

Como se recuerda, varios medios indican que el agua con la que se bautizó a los pequeños royals fue traída por el príncipe Carlos de su gira por Egipto y Jordania de la que regresó la semana pasada.

Sobre el secreto para mantener tranquilo a Lucas durante la ceremonia de bautismo, Tindall reveló que por la mañana llevó al pequeño a nadar.

“Creo que lo preparé para eso. El tenía muchas ganas de que le cayera el agua”, agregó el esposo de la nieta de la reina. 

Íntima celebración

El bautizo se celebró un día después del 74° aniversario de matrimonio de la reina Elizabeth II y el Príncipe Philip.

El bautizo de August y Lucas tuvo lugar en la Capilla Real de Todos los Santos en Windsor y consistió en una íntima ceremonia dado que estuvo marcada por la tristeza.

El día anterior al bautizo, la reina Elizabeth II recordó el aniversario número 74 de su boda con el príncipe Philip, el primero sin él después de su muerte en abril.

Además, la princesa Eugenie sufrió la perdida de su suegro, George Brooksbank, pocos días antes del bautizo. El padre de su esposo Jack murió la semana pasada a consecuencia de una enfermedad posterior a su lucha contra el coronavirus el año pasado.

A pesar de ello, la reina, la princesa Ana, el príncipe Andrew y Sarah Ferguson se dieron cita para celebrar el bautizo de los royals, que ocupan el noveno y décimo puesto en la línea de sucesión al trono.

El diario The Sun también indicó que el príncipe William,  y su esposa Kate Middleton también estuvieron acompañando a los Tindall y Brooksbank en la especial celebración.

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