Charlene de Mónaco se ha enfrentado en los últimos meses a una enfermedad que ha desatado especulaciones y gran revuelo internacional.
Por Arianna Gonzáles
El anuncio anual de las celebraciones del Día Nacional de Mónaco este año fue doblemente especial porque sugería que la princesa Charlene regresaría al Principado, luego de una larga estancia en Sudáfrica ocasionada, principalmente, por sus problemas de salud.
Como se recuerda, Charlene se encontraba en el país africano para supervisar actividades de su fundación. Sin embargo, luego de que se desmayara el 3 de septiembre, la princesa debió permanecer en Sudáfrica por más tiempo.
A pesar que tras el mencionado desmayo fue dada de alta pronto, la situación de la princesa alertaba una seria complicación de salud, pues meses después debió ser intervenida quirúrgicamente.
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Aunque la mayoría de comentarios sobre la recuperación de Charlene se basaron en una fotografía que ella colgó en Instagram, en la que se le veía recuperándose, las declaraciones de una fuente anónima a Page Six advierten que su estado actual no es el mejor.
“Lleva más de seis meses sin poder ingerir sólidos debido a todas las cirugías que se le han realizado desde entonces. Únicamente ha podido ingerir líquidos a través de una pajita, por lo que ha perdido casi la mitad de su peso”, dijo el informante.
La fuente también aclaró que es complicado recuperarse de varias cirugías con post-operatorios dificultosos, por lo que Charlene se siente “exhausta”
¿Un asunto de gravedad?
Charlene recibió la visita de su esposo e hijos en Sudáfrica.
De hecho, las declaraciones de la fuente coinciden con lo que Alberto de Mónaco declaró al periódico Monaco-Matin.
Entre lo que le dijo al diario, resalta la mención al cansancio y la necesidad de “descanso y seguimiento” de la princesa.
El príncipe también hablo con la revista People a quien le dijo que su esposa “estaba claramente agotada, física y emocionalmente”. Dicha entrevista también sirvió para aclarar rumores sobre la enfermedad de Charlene, pues el príncipe descartó que se trate de estragos del COVID-19 o algún tipo de cáncer.
Sin embargo, a pesar de la consideración que muestra Alberto cada vez que declara en entrevistas sobre el estado de salud de su esposa, la fuente que habló con Page Six indica que el palacio le “resta importancia” a Charlene.
Una princesa en apuros
Alberto de Mónaco y sus hijos realizaron una muestra pública de amor a la princesa.
A pesar de tratar de guardar las apariencias de una feliz familia, al parecer Charlene nunca terminó de encajar, ni en Mónaco ni en el corazón de Alberto.
La prensa francesa cree que el suyo es un matrimonio que lleva años cayéndose a pedazos y que estaría en sus últimos meses de vida.
Las supuestas infidelidades del príncipe han sido las teorías más poderosas detrás del alejamiento de Charlene del Principado e incluso, al inicio del 2020, el anuncio de una enfermedad de la princesa para muchos fue una excusa para evitar mostrar un matrimonio desgastado.
Sin embargo, los años que Charlene y Alberto llevan juntos han significado un reto para la princesa, que en 2010 le declaró a Tatler que “le costó sentirse aceptada en su nuevo hogar”.
“La gente con la que me relacionaba en Mónaco no entendía mi mentalidad y sentido del humor sudafricanos”, dijo en dicha conversación.
Además, Charlene alabó el papel de Alberto como esposo y resaltó que compartían muchos buenos momentos.
Sin embargo, 11 años después los rumores sobre una posible próxima separación son bastante fuertes y, aunque Alberto de Mónaco ha negado que la ausencia de Charlene se deba aflicciones en su relación como esposos, los monagescos no están convencidos de que diga la verdad.
¿Serán Alberto y Charlene los próximos en comprobar la superstición que indica que la realeza monegasca es desafortunada en el amor? Sólo el tiempo lo dirá.
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