Archie, el primogénito de Harry y Meghan, acude a una guardería en la que no saben que él y su familia pertenecen a la realeza. Además, esta destaca por su enfoque en la educación emocional y ambiental.
Por Redacción COSAS
Los duques de Sussex eligieron una guardería muy peculiar para Archie, ya que tienen lecciones que se encargan de desarrollar todos los tipos de habilidades en los niños, incluyendo el ámbito emocional, además de promover el contacto con la naturaleza. Aunque no se sabe el nombre de la guardería, se tiene conocimiento de que realiza actividades al aire libre, se enfoca en la práctica emocional y cuenta con un programa de jardinería. La guardería está ubicada en medio del campo y tiene un huerto en el que hay árboles frutados y colibríes, en donde los niños siembran y cosechan vegetales; de esta forma se reafirma su compromiso con sus valores relacionados con el medio ambiente. Además, enseñan español, teatro, danza y mindfulness.
Se sabe que a veces Harry y Meghan van a recoger a Archie y según un padre de familia de un compañero suyo, los otros niños no saben que él es de la realeza. Además, agregó que los padres recibieron a los duques con mucha calma y sin hacer escándalos. También comentó que si los niños supieran que la familia pertenece a la realeza, probablemente lo pasarían por alto, a menos que «Meghan fuera una princesa de Disney».
Una vida lejos del principado
Harry y Meghan decidieron irse de Reino Unido para tener una vida muy diferente a la de la realeza. Cuando nació Archie, quien actualmente tiene 2 años, se mudaron a Toronto y posteriormente a Montecito, una zona exclusiva de California pero también con una educación muy liberal. Aunque parecía que la mansión en la que vivían era la ideal para la familia, ahora parece que están en búsqueda de otras propiedades para mudarse.
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