Si bien la muerte de Elizabeth II ha afectado a toda la familia británica, el dolor del príncipe William no pasó desapercibido a pesar de sus intentos para que no se notase.
Por Daniella Bejarano
Horas después de estar reunidos en el Westminster Hall, los Windsor volvieron a salir para agradecer las muestras de cariño y respeto por parte del pueblo londinense por la muerte de la reina Elizabeth II. Por su parte, los príncipes de Gales, William y Kate, visitaron Sandringham, donde encontraron cientos de ramos de flores, cartas, regalos y fotos de la monarca.
En varias ocasiones, se pudo ver a un príncipe William afectado por la muerte de su abuela y además, reveló al Daily Mail que este proceso le ha recordado al funeral de su madre, la princesa Diana. «El estar caminando detrás del ataúd fue muy difícil porque me trajo a la mente muchos recuerdos», explicó.
Cabe resaltar que en todo momento se ha notado claramente el apoyo muto entre William y Kate por la dolorosa pérdida de Elizabeth II, la cabeza de la familia real.
Después de observar detenidamente las ofrendas en las puertas de Sandringham, los príncipes se acercaron a saludar a la multitud como muestra de agradecimiento a todo el amor que le están dando a la reina y su familia en estos momentos tan dolorosos. Sin embargo, un testigo le dijo al medio en mención que William confesó sentirse «abrumado» con todo el cariño y atención recibida.
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