La viuda del cofundador de Apple, Steve Jobs, fue la primera galardona en recibir la Medalla de la Felicidad Nacional Bruta, un premio que tiene como objetivo reconocer a aquellas personas que contribuyen a la mejora de la humanidad

Por: Redacción COSAS

Laurene Powell Jobs recibió la primera Medalla de la Felicidad Nacional Bruta en una ceremonia el jueves 16 de enero. Esta distinción, que fue ideada por los reyes dragón de Bután y que recuerda al concepto de los Premios Princesa de Asturias, busca reconocer a quienes dedicaron su vida a la mejora del bienestar humano y planetario, y tiene una particularidad: no se basa en el Producto Interno Bruto (PIB), sino en el concepto de felicidad y prosperidad espiritual.

Laurene Powell Jobs, viuda del cofundador de Apple, Steve Jobs, recibió la primera Medalla de la Felicidad Nacional Bruta, otorgada por la familia real de Bután en una ceremonia solemne.

La Medalla de la Felicidad Nacional Bruta hace referencia a un índice creado en los años setenta rey dragón de Bután, Jigme Singye Wangchuck,  que medía la prosperidad del reino a través de la felicidad de sus habitantes, un enfoque radicalmente diferente al utilizado por la mayoría de los países que priorizan las métricas económicas.

La distinción se otorga no solo por sus logros profesionales, sino también por la manera en que su trabajo resuena con los valores fundamentales de Bután: desarrollo sostenible, conservación ambiental, preservación cultural y buena gobernanza.

Con la instauración de esta nueva distinción, Bután se posiciona como un país pionero en la integración de valores espirituales y sostenibles en el ámbito global.

Laurene Powell Jobs

La viuda del cofundador de Apple, Steve Jobs, destacó en el ámbito filantrópico a través de su fundación Emerson Collective, que promueve causas como el medio ambiente, la educación y la justicia social. La Casa Real de Bután resaltó: “Laurene Powell Jobs ejemplifica una nueva era de la filantropía […] Su trabajo ha abierto nuevos caminos en la educación, ha apoyado soluciones climáticas y ha catalizado enfoques empresariales para enfrentar desafíos sistémicos”.

Powell Jobs recogió la medalla vestida con un traje tradicional butanés en una ceremonia en la que también estuvieron presentes el rey y la reina Jetsun Pema.

El vínculo de Laurene con el reino de Bután es profesional y espiritual. La empresaria mostró un creciente interés por las filosofías orientales, como el budismo y el hinduismo. Su difunto esposo, Steve Jobs, tuvo una profunda conexión con el budismo después de un viaje a la India en los años setenta, y su influencia perdura en la vida de Powell Jobs. Durante su reciente visita a la India, la empresaria participó en una ceremonia con un gurú y recibió el nombre espiritual de “Kamala”, como informaron medios como Times of India.

Además de recibir la medalla, Laurene aprovechará su visita a Bután para explorar el proyecto Gelephu Mindfulness City, un innovador desarrollo urbano inspirado en la práctica del mindfulness, que está situado al sur de Bután. Este proyecto tiene como objetivo mejorar la calidad de vida de los habitantes y promover un estilo de vida más consciente, reflejando así los mismos valores que el país promueve a través de la Felicidad Nacional Bruta.

En 2015, Laurene Powell Jobs lanzó «XQ: The Super School Project», una iniciativa de 50 millones de dólares dirigida a reinventar la educación secundaria estadounidense.

Bután: un modelo de bienestar integral

La inauguración de esta nueva distinción es una muestra más de la visión del reino de Bután, que se ha convertido en un modelo global en cuanto a la integración de valores espirituales y sostenibles en su sociedad. Con la Medalla de la Felicidad Nacional Bruta, Bután busca premiar a aquellos individuos que trabajan incansablemente para mejorar la vida humana y el estado del planeta, priorizando la felicidad colectiva por encima de los indicadores económicos tradicionales.

En palabras de la Casa Real de Bután, la medalla es “un reconocimiento a aquellas personas que han dedicado sus vidas a promover el bienestar de la humanidad y de nuestro planeta”.

Así, Laurene Powell Jobs no solo recibe un reconocimiento por sus logros, sino que se convierte en un ejemplo de cómo la filantropía, la sostenibilidad y la espiritualidad pueden combinarse para generar un impacto positivo y duradero en el mundo.

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