Al hablar de lugares siniestros en la capital, es imposible no pensar en la casa Matusita. La mayoría de leyendas paranormales que se cuentan en conversaciones de terror limeñas tratan de dicho inmueble. Sin embargo, Lima posee muchísimos más espacios encantados ajenos a las historias de la infame Matusita. Conoce en esta nota tres otras casas con historias espeluznantes.

Por Alejandro Tong

Casa Sousa

La Casa Sousa en la actualidad.

Ubicada en la cuadra 2 del Jirón Cajamarca, Barranco, esta casa fue construida en 1917. Se cuentan que existen varias entidades en este recinto. La más famosa es Amparo, también conocida como “La mujer vestida de novia”. Los reportes indican que es usual verla mirando por el balcón del inmueble esperando a su novio Ernesto que nunca regresó por ella.

La casa Sousa ha sido testigo de muchas investigaciones y puestas en escena aprovechando el misterio que rodea este palacete. Otra entidad recordada es una niña sin nombre que le jugaba bromas al casting de Clave Uno de Frecuencia Latina. Este espacio fue reconstruido para Casacor en el 2013.

Palacio de Osambela

El Palacio de Osambela.

Llamada también como la casa de Oquendo, esta construcción virreinal se encuentra en el Jirón Conde de Superunda del Cercado de Lima. Es conocida por dar alojo al general Don José de San Martín luego de proclamar la independencia.

La leyenda referente a este lugar cuenta que por las noches una extraña mujer de blanco pasea lentamente por los pasillos de la casona, golpeando las puertas y ventanas de los antiguos dormitorios tratando de ingresar. Vigilantes y personal del Osambela relatan estos hechos, asegurando que los ruidos son espeluznantes.

Casa Gamio

Fotografía de la misteriosa Casa Gamio.

Esta casa se sitúa en la avenida Arequipa Cuadra 42, Miraflores. La casa Gamio ha sido locación de varias series televisivas y películas. En el 2008, la escritora Michelle Alexander la usó para la grabación de Los del Barrio, sus anécdotas serían escalofriantes. Atestiguó que ella y su equipo de producción fueron testigos de apariciones en el viejo inmueble.

Cuenta que en uno de los dormitorios de rodaje se quedó sola pensando en los ángulos de la toma. Cuando ya estaba por salir, volteó y vio a una niña de aproximadamente ocho años vistiendo de rojo con medias blancas y zapatos negros. Dicho suceso fue contado por casi todos los medios de prensa del país. Incluso, Reporte Semanal realizó un especial en la casona captando momentos inexplicables: problemas de iluminación y el registro de un orbe que apareció en frente de la cámara. Días después, con ayuda de un médium obtuvieron el nombre de la niña: Clarita.

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