Soy mamá y no me compadezcas
Nathalie Otarola
Mi blog nace de la necesidad que tenía de expresarme sin sentirme juzgada. En hacer confesiones, cuestionarme y ayudar a otras mamás a darnos cuenta de todo lo que podemos lograr si nos olvidamos de los estereotipos inalcanzables de la madre perfecta. Quería hablar de una mamá real, primeriza, inexperta (así este repitiendo el plato por segunda vez), que no tiene todas las respuestas a la mano, llora, ríe, pierde la paciencia, se equivoca, lo soluciona y probablemente se vuelva a equivocar, pero vive por sus hijos y es perfecta para ellos.
«Soy mamá y no me compadezcas» logró que muchas mujeres se unan e identifiquen con #mamáimperfecta y que hagan catarsis juntas e incluso confesar lo que no se atrevían. Todas aprendemos de todas y es súper lindo porque nos apoyamos, comprendemos y retro alimentamos de esa manera. Es una comunidad de mujeres donde nos hemos hecho muy amigas, incluso sin conocernos. La maternidad a veces puede ser solitaria y prejuiciosa, y lo que más valoro de esta página es que es un lugar de encuentro, amistad y compañía.