Tamara Falcó ha regresado a la mesa de conducción de un popular programa español luciendo un anillo cargado de significado.
Por Redacción COSAS
Luego de realizar su primera peregrinación al Santuario de Nuestra Señora de Lourdes, en Francia, Tamara Falcó ha regresado a España para retomar sus compromisos laborales y reapareció ayer en la conducción del programa El Hormiguero.
La hija de Isabel Preysler se mostró bastante relajada y feliz después de su experiencia religiosa con los voluntarios de la Hospitalidad de la Virgen de Lourdes de Madrid e incluso se animó a contar detalles de ella. Mientras lo hacía, no pudo pasar desapercibido un anillo de gran tamaño que llevaba en el dedo índice de su mano izquierda, a solo unos lugares de donde por algunos días lució el anillo de compromiso que Iñigo Onieva le regaló.
El significado del anillo de Tamara Falcó
El triple anillo trenzado pertenece a la colección Twisted de la marca Tous, con la que Tamara tiene un acuerdo comercial como influencer y ha colaborado con anterioridad en la creación de una colección en honor a la Virgen María.
Valorizado en más de 1200 soles, la pieza, al igual que el resto de la colección, transmite el importante mensaje de «conectar contigo misma para luego poder conectar con los demás», mirando hacia el futuro y hacia la búsqueda de encontrar una forma de vida «brillante».
El objetivo de la colección sigue de cerca los ideales actuales de Tamara, quien viene recuperándose de una de las etapas más fuertes de su vida, luego de que rompiera su compromiso con Iñigo Onieva menos de una semana después de que el empresario le pida la mano, debido a la revelación de unas fotografías en las que le era infiel en el festival Burning Man.
Concentrada en el presente
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Luego de algunas referencias sobre el fin de su relación durante su participación en el XIV Congreso Mundial de las Familias, celebrado en México, donde definió la ruptura de su compromiso como «un despertar espantoso» y admitió estar «pensando en el perdón», Tamara Falcó ha decidido no pronunciarse sobre esta época oscura y prefiere hablar de su presente.
En su última aparición en El Hormiguero, aprovechó para dar detalles sobre su estancia en el santuario de Virgen de Fátima y contó que su voluntariado estuvo enfocado en las tareas culinarias, debido a su preparación como chef.
«Me ha encantado, ha sido precioso, ha sido un descanso para el espíritu, ha sido preciosa la experiencia. Me han dicho que es un buen sitio para empezar y después ir avanzando. Hice algunas bebidas y algunos montaditos… hice lo que pude», sostuvo entre risas, mientras animó a los televidentes a visitar el lugar porque es un lugar perfecto para «no solo sanar el cuerpo, sino el alma».
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