La revista americana Rolling Stone reconoció el talento y visión del artista limeño Lenin Tamayo, por su capacidad para combinar sus raíces quechuas y el K-pop en el nuevo genero llamado Q-pop.
Por Iris Torrejón
En un estilo sin precedentes, Lenin Tamayo ha logrado fusionar las raíces culturales quechuas con la sensación del K-pop y consolidarse como la estrella pop visionaria del Perú, según la aclamada revista Rolling Stone. La creación de su género musical, denominado Q-pop, ha catapultado al joven artista a la fama internacional, donde su innovación y impacto no pasaron desapercibidos.
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Desde su debut en 2019, Lenin Tamayo ha unido la esencia del K-pop con la poesía ancestral y las enseñanzas de los indígenas quechuas. Por ello, la revista Rolling Stone ha elogiado su influencia, destacando su EP AMARU I, que incluye sencillos cautivadores como «Kutimuni» y «Amarullaqta», junto con videos cinematográficos coreografiados que le han permitido un espacio en la industria musical.
«Hemos estado esperando una estrella del pop visionaria como Lenin de Perú», expresó Rolling Stone.
Lenin Tamayo compartió su alegría por el reconocimiento a través de sus redes sociales, destacando la importancia de su último álbum conceptual, «Amaru», como un reflejo de su historia, amor por la música y la cultura.
La fusión única de quechua y K-pop en su música no fue solo un capricho para Lenin, sino un escondite de las experiencias difíciles que enfrentó durante su tiempo en la escuela. El joven cantante confesó haber sufrido acoso y bullying y haber encontrado refugio en la música K-pop, donde pudo ser auténtico y hacer amigos que lo acompañan hasta el día de hoy.
Lenin Tamayo: ¿Cómo inició el Q-pop?
La semilla de fusionar sus raíces andinas con la modernidad del K-pop fue plantada en su mente durante su tiempo en la universidad, y así nació el género Q’pop con su primer sencillo. La inspiración para este movimiento se manifestó en la readaptación de la canción «Tusuykusun» de Damaris, fusionada con la estética del K-pop, resultando en la canción «Imaynata», inspirada en la diablada, que catapultó a Lenin Tamayo a la escena internacional.
«Yo no era muy grande y no conocía a nadie. Soy muy joven, estoy iniciando a los 23 años, entonces una vez que despegó esto en redes sociales con la gente que hice en el camino, que ahora son mis amigos, producimos una canción de cero que se llama Imaynata», compartió Tamayo.
Con su talento y visión única, Lenin Tamayo ha trascendido fronteras y se ha convertido en un símbolo de la fusión cultural, demostrando que la música es un lenguaje universal que puede unir a personas de diferentes rincones del mundo.
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