Durante su visita a Roma, una escena entre los monarcas británicos encendió las redes, pero más allá del revuelo, evidenció la cercanía y naturalidad

Por: Redacción COSAS

El rey Carlos III protagonizó una escena inusual durante su visita oficial a Roma al exclamar en voz alta: «¡Camilla, ven aquí!«, visiblemente impaciente porque su esposa no llegaba a tiempo para la foto protocolar junto al presidente italiano, Sergio Mattarella.

El gesto, captado por las cámaras y viralizado en redes sociales, mostró al monarca británico gesticulando con énfasis —demasiado para un inglés— mientras Mattarella, más contenido, agitaba las manos más suavemente que el rey que tenía al lado, generando un curioso efecto “play jouer” que convirtió el momento en una escena inesperadamente cómica.

Momentos antes, Camilla protagonizó otro desliz protocolario al colarse en la foto de los dos jefes de Estado delante de la guardia de honor del Quirinale, siendo amablemente retirada del encuadre por Laura Mattarella, hija del presidente.

Los reyes Carlos III y Camilla también visitaron al papa Francisco este miércoles en el Vaticano.

Las reacciones no tardaron en recordar el enojo del monarca por un lapicero defectuoso, poco después del fallecimiento de Isabel II. Aquella escena y esta última “regañada” comparten una cualidad: el rostro humano de la realeza que, pese a los protocolos, no siempre puede (o quiere) disimular emociones.

 

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